Los primeros movimientos para comenzar a sustituir las losetas resbaladizas de mármol verde que tantos accidentes provocaron y provocan han comenzado este lunes cerca del edificio Trujillo, en Ceuta. La empresa que realizará este trabajo, ACC, ha comenzado el perimetraje de la obra para comenzar más a fondo durante esta semana con las ejecuciones y ya ha retirado algunas de las losas. Estas actuaciones se encargaron en noviembre del año pasado, pero se fueron retrasando a la espera de la llegada de los materiales pertinentes y de la concesión de la licencia de obra civil. Esta actuación es una de las más reclamadas por los ceutíes, ya que durante el invierno se producían resbalones, uno detrás de otro, por las lluvias. Algunas personas incluso han tenido que pasar por el Hospital Universitario para se tratadas.
La empresa dispondrá de tres meses para la realización de los trabajos, que se han iniciado este lunes, por lo que se prevé que se den por finalizadas para el mes de diciembre. Han comenzado desde el edificio Trujillo y de ahí subirán hacia arriba hasta completar el paseo del Revellín, lugar donde se encuentran las peligrosas losetas verdes. El proyecto incluye una superficie de actuación superior a 3.000 metros cuadrados. En primer lugar contempla la retirada temporal de todo el mobiliario urbano que dificulte la labor de sustitución de las baldosas (papeleras, bancos, maceteros, etcétera), aunque no se sustituirá debido al buen estado de conservación que presenta el mobiliario.
Acto seguido se procederá al levantado de todo el tipo de pavimento identificado en los planos del proyecto técnico, el cual ha tenido en cuenta, igualmente, las posibles pérdidas que la operación pueda suponer en las baldosas adyacentes a las que se quitarán. De igual forma y como uno de los objetivos de la actuación, se eliminarán las barreras arquitectónicas existentes (supresión de pendientes elevadas en cambios de rasantes entre viales) y se procederá a la implantación de un semáforo en el cruce del Paseo del Revellín con calle Padilla.
De acuerdo con la memoria de la actuación, estos trabajos se llevan a cabo porque “la superficie de estos elementos presenta un importante grado de deterioro que ha incrementado el nivel de peligro de tránsito de los peatones, como demuestran los accidentes que se han producido en los últimos años”, que han conllevado múltiples condenas contra la Ciudad con el abono de indemnizaciones a víctimas de resbalones y caídas en distintos puntos.