La tercera edición de la travesía Ribera-Pineo Sorteo de Oro se ha suspendido debido a la densa niebla que cada vez más se estaba haciendo notar en la playa de Fuente Caballos, en Ceuta, imposibilitando el desarrollo de la prueba debido a la poca visibilidad de los nadadores en caso de que se hubieran lanzado al agua.
La organización decidió aplazar -una vez más- hasta las 12:00 como hora tope para el inicio de la salida, pero eran pocas las esperanzas de los nadadores ya que había mucho revuelo de si se celebraba o no.
Muchos querían, otros no. Los que sí apostaban por celebrar la prueba no eran conscientes del peligro que ocasionaba lanzarse el agua.
Decisión, a las 12:00 horas
Conforme pasaban los minutos la niebla se hacía más densa en esta zona de la ciudad autónoma, prácticamente sin visibilidad en el horizonte, dando a entender que la prueba no se tenía que celebrar.
Minutos antes de la pretendida salida se podía ver cómo los atletas entraban en calor en el agua recorriendo algunos metros cerca de la orilla.
Capitanía y Guardia Civil se pusieron de acuerdo con la organización de ANAA para cancelar la prueba debido al riesgo que conllevaba lanzarse al mar ante la poca visibilidad que había.
Hubo minutos de desconcierto entre los nadadores que no sabían que hacer si irse o esperar. Algunos se iban, otros se quedaban esperanzados, pero era imposible debido a la poca visibilidad que había para celebrarse la prueba.
Una prueba emblemática
La emblemática playa de Fuente Caballos iba a ser este sábado el escenario de una vibrante jornada deportiva con la celebración de la tercera edición de la travesía a nado Ribera-Pineo Sorteo de Oro, una cita que, por tercer año consecutivo, reunía a nadadores de distintas edades y niveles en un entorno natural incomparable.
La prueba, organizada por la asociación de natación de Aguas Abiertas de Ceuta en colaboración con Cruz Roja, pone el foco en la natación en aguas abiertas como una disciplina en crecimiento y con gran acogida en nuestra ciudad.
Había 150 nadadores divididos en dos distancias: una prueba de 2.000 metros y otra más exigente de 4.000 metros. Finalmente, no han podido competir.
Identificación de gorros
Para facilitar la identificación de los participantes y asegurar una correcta organización en el agua, los nadadores lucían gorros de distinto color según la distancia en la que competían.
Alrededor de las 10:30 horas comenzaron las labores de señalización y control por parte de los voluntarios de Cruz Roja y el equipo de logística de Aguas Abiertas, para garantizar que todo estuviera listo para el inicio de las pruebas en condiciones de máxima seguridad.
Finalmente, la salida no se llevó a cabo por cuestiones de seguridad.
Ambas carreras iban a tener su punto de partida en la playa de Fuente Caballos, aunque cada una con un itinerario distinto.
La prueba de 2.000 metros llevaba a los nadadores hasta la playa del Chorrillo, desde donde realizaban el viraje para regresar por el litoral hasta alcanzar la meta situada en la playa de la Ribera.
Resistencia en 4 kilómetros
Por otro lado, los participantes en la prueba de 4.000 metros tenían que mostrar su resistencia en un recorrido mucho más exigente.
El punto clave del recorrido era la piedra del Pineo, un lugar emblemático que debían sortear.
Además del componente competitivo, la travesía ‘Ribera-Pineo Sorteo de Oro’ también tiene un carácter solidario, al contar con la colaboración de Cruz Roja, que promueve la seguridad en el agua y la concienciación sobre la importancia de la prevención en entornos acuáticos.
Se tendrá que celebrar en otra ocasión debido a la niebla.
Dispositivo de auxilio
Durante toda la prueba, socorristas y voluntarios se habían preparado para prestar apoyo tanto desde embarcaciones como desde la costa, asegurando una jornada sin incidentes.
La travesía se ha afianzado como una cita imprescindible en el calendario deportivo local en cuanto a natación se refiere, ya que es mucha, la afición que hay por la natación en Ceuta.
La jornada de este sábado es de interés deportivo ya que se va a completar con el acto que va a tener lugar esta noche con la carrera que parte desde el centro ecuestre de nuestra ciudad.
Coinciden además con la jornada de la festividad más especial para la comunidad musulmana, el Eid al-Adha.
Impresiones de los nadadores
Los atletas que iban a competir entendían a la perfección la decisión tomada por la organización de cancelar la prueba. Aun así, quisieron dar su versión y mostrarse cómo se sentían: “Todo el mundo queríamos nadar y la gente todo lo que se ha preparado porque llevamos trabajando tres días para la prueba y... mal, no te puedo decir otra cosa”, decía una nadador con los ánimos caídos.
Y también entienden la decisión: “Es cosa de la organización, Guardia Civil, Capitanía… son los que nos dictan si se puede o no se puede. Entonces se ha metido una niebla tremenda y no se puede arriesgar la vida de la gente, porque tú sales solo del espigón y te pierdes se mete la niebla bien y estás perdido”, concluyó.
“Nos da mucha pena, porque somos muchos nadadores porque si la prueba fuera pegada a la piedra pues sí pero viendo al niebla que hace es imposible”, sostuvo una nadadora.
Además, son conscientes del peligro que conllevaba tirarse al agua: “Puedes aparecer en Marruecos perfectamente”, advirtió una deportista, alegando a que el agua “es muy traicionera”.
Buena decisión; la pasada madrugada muchos que veían el parpadeo azul también regresaban a tierra. Alrededor de 60 sin gorros