Este agosto habría cumplido 27 años. Su cuerpo terminó sin vida en la orilla de la playa de la Almadraba en una jornada de presión en el mar entre Marruecos y Ceuta. Llevaba muerto horas, el frío de esa noche pudo influir en su final.
La Guardia Civil ha identificado al joven argelino hallado sin vida esta semana. El sexto del año y el primero de este mes de febrero. Portaba un carné de identidad y otro de conducir. Ambos documentos han sido claves para esa identificación, además del fácil reconocimiento del cuerpo debido al poco tiempo que estuvo sin vida cuando lo localizó una patrulla del Instituto Armado.
Enfundado en un traje de neopreno en tonos negros y verdes, el joven llevaba ropa interior y usaba aletas grises. Al cuello portaba un collar. En esa travesía había decidido llevar consigo algunas pertenencias que le han acompañado hasta el final de este periplo.
La importancia de dar con sus familiares
Conocer el origen, su nombre y apellidos, permitirá realizar contactos con entidades oficiales para dar con su familia. Es importante para conseguir la repatriación. Entre la comunidad argelina se trata por todos los medios que quienes fallecen en esas expediciones migratorias puedan ser enterrados en su propio país, buscando así el consuelo para sus padres.
Por eso mismo es importante la localización de sus núcleos familiares más próximos, al objeto de permitir que el cuerpo de este joven sea enterrado en Argelia.
En este caso en concreto, se busca a la familia del joven para conseguir iniciar unos trámites que permitan esa despedida en su país.
¿Qué hay que hacer?
La Guardia Civil recomienda siempre que ante cualquier caso de desaparición se presente denuncia y aporten muestras de ADN, ya que son determinantes a la hora de poder verificar identidades.
Esto se puede hacer en cualquier comandancia de España y es clave que se haga en Marruecos o Argelia, ya que así se contará con la identificación en las bases compartidas a nivel internacional.