La Ciudad ha apurado hasta el último día el plazo de 30 días para elevar a la Demarcación de Carreteras del Ministerio de Fomento el informe en el que expone sus planteamientos respecto a la situación en que se encuentran las barriadas de Benzú y la Almadraba, así como varios solares que se han excluido del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).
El Ministerio de Fomento presentó el pasado 4 de julio a la Ciudad la aprobación provisional del Estudio de Delimitación de Tramo Urbano de Ceuta por el cual las dos barriadas quedaban fuera de la ordenación. En la misma situación se encuentran varios solares, tanto de titularidad pública como privada, ubicados en las carreteras N-352 y N-354, ya que la legislación exige un mínimo de 25 metros entre los viales de circulación y dichas edificaciones.
Los trabajos previos de redacción que se llevaron a cabo en colaboración de los técnicos de la Ciudad y de Carreteras no derivó, sin embargo, en la plasmación en el documento de las peticiones del Gobierno local, dejando fuera a estas dos barriadas y a los solares. “Esto dificulta mucho cualquier labor tendente a la consecución de las licencias para construir lo que corresponda según el urbanismo”, matizó el consejero del ramo.
Obligada a presentar un informe recogiendo las valoraciones de la Ciudad ante el documento del Ministerio, García ha anunciado que hoy se elevará el escrito ante la Demarcación de Carreteras. “Lo vamos a presentar hoy con la documentación y argumentación técnica que creemos que nos avala para pedir que estas barriadas no se queden fuera y que no se vean afectados los intereses de ningún ciudadano en particular, organismo público o barriada”.
Mientras esperan la resolución del informe, la Consejería de Fomento ha solicitado una reunión con el director general de Carreteras que García confía en que se celebre este mes de septiembre y al que también se ha reclamado la presencia del secretario de Estado “por la injundia que tiene este tema”.
La cesión de la N-354 solicitada por la Ciudad “haría desaparecer el problema”, ya que el Gobierno local sería el único responsable para establecer los límites de edificación de 25 metros. Además, el Ejecutivo local ha empleado argumentos basados en el objetivo lineal, por los cuales en cualquier carretera donde ya existan edificaciones y el estudio del tramo urbano comience en la fachada, el solar debe regirse por los mismos criterios. “Sería absurdo que un solar que está al lado tenga que respetar esos 25 metros y se encuentre con las trabas de pedir permiso a Carreteras para poder construir”, conjetura García.
El hecho de que en Benzú y la Almadraba no se hayan acometido las figuras urbanísticas que se deberían haber desarrollado en los últimos años no es justificación para que “se queden fuera de la ordenación y no se pueda construir”, apunta García, recordando que, de no incluirse en el plan urbanístico, las únicas obras en la zona serán las “tendentes a la conservación y mantenimiento, una situación que va en contra de los ciudadanos”.
García ha anunciado que la aprobación del PGOU está ahora a expensas del informe de servidumbre aeronáutica, que podría recibirse en los próximos días y en segundo lugar en la respuesta ministerial sobre el tramo urbano en estas zonas. Para ello deberá responder las alegaciones presentadas, entre otros organismos por Caballas y por el Colegio de Arquitectos, paso que dará lugar a la convocatoria del Pleno de la Asamblea para la aprobación provisional del documento.
Caballas alude a la “consolidación urbana indiscutible” de ambas barriadas
Una vez conocido el estudio de delimitación de tramo urbano por el cual las barriadas de Benzú y la Almadraba quedaban excluidas del Plan General de Ordenación Urbana, Caballas presentó una alegación en la que indican que esta decisión “afecta de manera directa a las limitaciones a la propiedad, régimen de autorizaciones, infracciones y sanciones, de todos y cada uno de los propietarios afectados, que verán sensiblemente limitados sus derechos”. Según el grupo de la oposición supone, además, un “inexplicable atropello al conjunto de ambas zonas, cuya consideración de consolidación urbana es indiscutible”, al tratarse de dos barriadas que forman “parte indisociable de la estructura urbana de Ceuta”.
Por otra parte, el grupo parlamentario incide en que la proximidad al mar, por un lado, y su limitación orográfica, por otro, impiden una morfología diferente. “La imposición de los 25 metros supondría un recorte imposible de reordenar. Esto resulta desde todo punto de vista irracional en una ciudad en la que uno de sus problemas fundamentales en materia urbanística es, precisamente, la limitación de suelo”.
No tendría ningún sentido, apuntan añadir una nueva restricción a las que ya se padecen desde tiempo inmemorial”.
El asfaltado de la zona de embolsamiento podría iniciarse mañana
El betún necesario para concluir el asfaltado de la zona de embolsamiento podría estar en la ciudad a primera hora de esta mañana, en caso de haber llegado a buen término las gestiones del Gobierno para su traslado hasta la ciudad en un barco alternativo al que lleva a cabo el transporte de mercancías peligrosas a Ceuta.
El barco que habitualmente desarrolla este servicio sufrió una avería recientemente que no podrá subsanarse hasta el jueves, lo que retrasaría la continuación de las obras de la zona de embolsamiento en Loma Colmenar. Tras conocerse que la compañía responsable de este transporte tenía intención de botar una nueva embarcación para no suspender los envíos, la Ciudad comenzó los trámites para recibir el material a la mayor brevedad posible.
De llegar a nuestra ciudad hoy, los trabajos de asfaltado darían comienzo mañana miércoles antes de concluir con la última fase, la de los trabajos complementarios que desarrollarán Amgevicesa y Obimace y que pondrían el punto y final a la habilitación de la zona de embolsamiento que entraría en funcionamiento en los próximos días, según anunció el consejero de Fomento, Néstor García, “antes del día 10 que es la fecha en que se restablecerá el porteo en el Tarajal”.