La magistrada titular del Juzgado de lo Penal 1 de Ceuta ha condenado a un marroquí con residencia en España a 3 años y 2 meses de cárcel por un delito contra la salud pública.
La Guardia Civil lo detuvo en la zona previa al embarque, en el puerto, con 15 kilos de hachís escondidos dentro del depósito de combustible de su vehículo, modelo Wolkswagen Golf.
Ante la magistrada, y tras conversaciones entre Ministerio Fiscal y su letrado, el ahora condenado aceptó la pena impuesta, todo ello tras confesar que se prestó a facilitar el pase de drogas entre Ceuta y la Península.
El implicado en este caso es, además, reincidente en la comisión del delito. La Guardia Civil le puso los grilletes el pasado 2 de agosto justo cuando procedía a ese embarque.

El trayecto del hachís que termina entre rejas
Cuando los agentes detectaron la droga oculta le terminaron colocando las esposas por haber cometido un delito contra la salud pública. Durante este tiempo ha permanecido preso preventivo, hasta que ya ha escuchado de viva voz la condena por estos hechos.
El ya condenado reconoció los hechos y aceptó un acuerdo entre las partes que ha pasado por la aceptación previa del delito.
Su historia es una más dentro del grueso de casos asociados al tráfico de estupefacientes que se suceden en nuestra ciudad y que tienen como principal escenario el puerto de Ceuta.
De la detención a la entrada en la cárcel
Ese trayecto iniciado con la ocultación de la droga termina ahora en una celda en Mendizábal, con una sentencia que además es firme por lo que contra la misma no cabe recurso.
Tanto la droga como el coche empleado para su trasvase al otro lado del Estrecho fueron intervenidos por la Guardia Civil.






