Una nueva edición del mercado artesanal ha concentrado este domingo en la Plaza Nelson Mandela una amplia oferta de artículos para todos los gustos y edades, elaboradas por asociaciones de carácter social y particulares. Un evento en el que se dan la mano la solidaridad, a través de la presencia de entidades como ADEN, la Asociación Española Contra el Cáncer o TDAH, y la diversión con la presencia del grupo ‘Pedacitos de diversión’, que ofreció un espectáculo de Halloween que hizo bailar a los más pequeños.
El público que se acercaba hasta las inmediaciones del Auditorio del Revellín podían encontrar desde artículos para el hogar, fundas de gafa, bolsos de aseo o baberos, todo ello elaborado por usuarios de ADEN.
“Aunque padecen distintas dolencias físicas, ellos buscan la máxima perfección para que puedan venderse”, apunta Sire Marroco, la presidenta de ADEN, que empleará los fondos recaudados para realizar alguna actividad con los usuarios.
Los familiares de niños afectados por Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad o TDAH, se han encargado de elaborar distintos y variados artículos que hoy se han puesto a la venta, junto a las donaciones de particulares que quisieron colaborar con esta causa.
“La recaudación irá destinada a costear las terapias psicopedagógicas que ofrece la asociación en el instituto Abyla y para las que contamos con cuatro profesionales”, apuntó la presidenta de la asociación TDAH, Holaya Abdel-Lah.
Los ciudadanos que hoy se han acercado hasta la plaza de Nelson Mandela podían adquirir desde muñecos reborn, cuya semejanza con un niño real dejaba con la boca abierta a más de un visitante, hasta productos más específicos como los que ofrecía Eloísa Galeote, cuidadora de una de las colonia de gatos callejeros autorizada por Sanidad, y cuyos fondos irán destinados a la alimentación de estos animales.
“Hay bolsos, monederos, llaveros... pero en todos ellos aparece la imagen de un gato”. Esculturas y diversos trabajos en cuero también estuvieron presentes en esta cita, en la que los artesanos recrearon la antigua moneda de Ceuta: el ceitil, o bien emblemáticos monumentos de la ciudad, como son las Murallas Reales. Y para los más atrevidos, una partida de wargame o juegos de guerra en miniatura, la mejor manera de meterse en una batalla sin salir de casa.
Los miembros de la asociación ‘Guardianes de Kronus’ llevaron hasta el mercado artesanal varios tipos de juegos: desde la batalla entre dos ejércitos por el control de un territorio, hasta el combate entre comandos o, una tercera opción, “más competitiva, donde la estrategia juega un papel determinante”, explicó el presidente de la entidad, Javier Pérez. Antes de comenzar el juego las figuras en miniaturas requieren montaje y pintura, lo que las convierten en piezas únicas.