Un presente que desluce a las murallas Meriníes de Ceuta. Erigidas con majestuosidad en el pasado, a día de hoy presentan una imagen poco favorecedora. Basuras, heces de perros esparcidas y malezas rodean a gran parte de este monumento.
La asociación vecinal de Villajovita y Septem Nostra se pronuncian al respecto. Piden un cambio y un vuelco definitivo de la situación en la que se encuentra este trozo de patrimonio ceutí. Un símbolo de identidad de la zona que necesita una serie de mejoras, según apuntan las dos entidades. A esta “dejadez” se suma la falta de carteles informativos que expliquen su historia. Son, en cierto modo, desconocidas para quien pasa cerca de ellas.
José Manuel Pérez, presidente de Septem Nostra subraya que es necesario cuidar su entorno, así como la instalación de señales que indiquen datos básicos sobre ellas. “Es cierto que no están en el centro. No son tan visibles ni tan reconocidas, pero eso no les resta importancia. Hay que llamar la atención sobre la deuda que hay con estas murallas para que se pueda suplir lo antes posible”, apostilla.
La parte sur no se encuentra en su mejor momento. “Es bastante llamativo. Ahí sigue existiendo el problema de excrementos, de basuras y demás. Ofrece una imagen descuidada”, apunta. Tiempo atrás la zona en la que se halla la puerta de Fez también estaba acompañada de estos elementos. Sin embargo, ha experimentado un cambio notorio de forma reciente en positivo.
Pérez resalta la relevancia de prestar atención al resto del conjunto que conforma este legado del pasado. “Hay que tener en cuenta que los monumentos son como personas mayores. Tienen muchos siglos. Como ellos precisan continuamente un diagnóstico, una analítica. Pasa igual. Ver que partes están peor, cuáles requieren una actuación inmediata, cuales pueden esperar”, reflexiona. Otra de las reclamaciones surge en torno al Plan especial de Protección y Reforma Interior de las Murallas Merinidas, aprobado en 2005. “Creo que tras casi 20 años toca hacer una revisión de esa estrategia”, comenta Pérez. Se trata de pasar revista a este proyecto para “ver qué se ha conseguido, qué se ha hecho y actualizar los objetivos”, puntualiza. Este, entre otros cometidos, contempla la reubicación de las viviendas que se solapan con las murallas en algunos de sus tramos. Aún no se ha llevado a cabo. Queda a la espera sin una fecha barajada. Esta actuación se decidió a favor de la preservación de esta antigua pieza arquitectónica. La presencia de otros edificios afecta, al fin y al cabo, a su estructura.
José Manuel Pérez Rivera, presidente Septem Nostra: "Los monumentos son como ancianos. Precisan de un diagnóstico continuo"
Otro de los puntos clave era la creación de un centro de interpretación dedicado a este monumento. Sin embargo, según informa Fernando Villada, arqueólogo, se descartó finalmente. “Estaba previsto inicialmente. La Comisión de Patrimonio Cultural dictaminó que el espacio para este fin se iba a dedicar a otras cuestiones”, indica. El presidente de Septem Nostra estima que es preciso contar con este canal de difusión de la historia de las murallas. “Era un museo para que aquellas personas que estuvieran interesadas pudieran conocer el origen, la evolución histórica del lugar y sus significados”, cuenta.
“Hay que investigar, excavar, documentar y después trasladarlo en forma de información a través de todos los medios”, explica. Es este el motivo por el que hace hincapié en la necesidad de fundar un espacio para brindar más datos sobre estas infraestructuras. “Es importante. Podría incluso dinamizar la barriada, darle mayor prestigio también”, comenta. A su vez considera que ello permitiría “a Zurrón y a Villajovita sentir que esas murallas son suyas y que son un símbolo. De hecho, la puerta de Fez y parte de las murallas aparecen en la imagen del instituto Almina”, menciona.
A ello hay que sumar la necesidad de revisar la restauración efectuada en la zona de la calle Rampa Pedro Mata. El paso del tiempo ha desvestido la mezcla que se aplicó sobre una de sus partes. Se ven ladrillos al descubierto producto de la erosión.
Las murallas Meriníes sufren el incivismo de los transeúntes y presentan una imagen de descuido. Continúan en un estado nada favorecedor a la espera de un giro de 360 grados que le devuelva su rostro imponente.
Una corona llena de malas hierbas
A excepción del tramo que se encuentra frente al instituto Almina, las murallas Meriníes están coronadas en su cúspide por malezas. Plantas que se abren paso y que no solo afectan a su estética. “No solo tienen un impacto visual”, comenta Pérez. “Ponen en peligro la consistencia de los lienzos de la muralla”, añade.
A ello hay que sumar que su repercusión es aún mayor al estar constituidas por tapial, un material hecho a base de barro y agua. Es, por tanto, menos resistente a las inclemencias y a la erosión. “Más allá de lo que son las labores de limpieza cotidiana, lo que es una limpieza de cara, también se debe trabajar con objetivos más ambiciosos que incluyan una aplicación completa”, asevera el presidente de la asociación. Asimismo, indica la importancia de incluir señales que expliquen su historia.
“Es relevante para poder valorarlas y conocerlas”, asegura. Este asunto también repercute en el propio turismo cultural de la ciudad, según Pérez.
Totalmente cierto todo lo que se está diciendo. Pongo sobre todo hincapié en la zona de la puertecita que comunica Villa Jovita con la parte trasera del Colegio Valle Inclan. Esas escaleritas y esos aparcamientos están continuamente llenos de basuras de los incívicos que están continuamente vertiendo las ahí. Luego encima, lo queman todo y ponen en peligro la integridad de los coches que aparcan allí. Está barriada está abandonada por completo. Ni se limpia ni se controla el vertido de basuras,etc....., nada de nada. Después pedirán los votos.
Mi querido amigo Pepe:
La mejor manera de invisibilizar parte de nuestro patrimonio histórico y cultural, es precisamente el destierro institucional y político que están sumidas las Murallas.
Hemos pasado de un "homicidio imprudente" a un "homicidio doloso" de parte de nuestra historia, una historia común, en la que Madina Sebta fue un referente no solo en el mundo musulman, sino también un enclave de peso en todos los ámbitos entre Europa y África.
Los políticos son copartícipes de este homicidio de nuestro legado, de nuestra historia, de nuestra identidad.
Esa identidad común, por mucho que la ultraderecha se esfuerce en mimar a las Murallas Reales, nos permite interactuar desde un plano simétrico, a la vez que permite a nuestras generaciones venideras, entender nuestro pasado para mejorar un presente incierto en el que la convivencia brilla por su ausencia.
Por tanto, la principal causa no es el incivismo y el desconocimiento de nuestros conciudadanos de su historia común; el verdadero problema reside en una estrategia de borrar una parte del alma de Ceuta, que no a todos, se sienten orgullosos, a pesar de ser uno de los momentos históricos más esplendorosos de Ceuta y de la historia común del Reino de España.
Si fuera como está diciendo no promocionarán tanto la Puerta Califal, ni la llamarían por ese nombre cuando hay otros restos junto a la Puerta.
Yo creo que tiene más que ver que no están en el centro.
De igual modo, es un "homicidio doloso" lo que está pasando con todo el patrimonio ceutí, y en concreto, con el periodo medieval .Ya lo que faltaba que le cambiaran el nombre a la Puerta Califal y se llamase, "La Puerta lusa".
Saludos.
Se entierran millones en cambiar y cambiar locetas del centro una y otra vez, se montan empresas municipales obimace, planes de empleo, y escuelas taller, y digo yo , esto es una opinión non podría dedicarse parte de ese dinero a mantener el escaso patrimonio ceuti? No se en gran Vía se han inventado un monumento, la plaza de África ha enterrado unos pocos de millones en estar igual, las locetas del Revellin se cambian como los cromos y podríamos seguir, pues nada en lugar de recuperar el escaso patrimonio o adecentar nuestros espacios verdes, montes, playas a dilapidar .
Una vez más, queda demostrado la falta de interés del gobiernos local por las barriadas, Si las murallas estuvieran en el centro , sería distinto. A pesar del valor histórico de las mismas, nadie se preocupa de su conservación y ni siquiera forma parte del itinerario turístico, se supone que por vergüenza para no ver su estado y la dejadez de V. Jovita, y como siempre todos callados y votando a los mismos.