Algo más de cien personas consiguieron cruzar a Ceuta en la mañana de ayer. A plena luz del día, por el mismo punto por el que se produjo el pase el 26J y siguiendo idéntico modus operandi. “Ha estado perfectamente preparado, han aprovechado justo el momento del rezo, a las nueve de la mañana. Nunca se había producido algo así, a plena luz del día. Están perfectamente organizados”, explicaba a pie de terreno un componente de la Benemérita.
A la altura de Berrocal, la ITV y Arroyo de las Bombas las alertas sonaban como nunca, después de una noche en la que se preveía que podía intentarse esa entrada masiva precisamente por la celebración de la Pascua del Sacrificio, la menor presencia de agentes marroquíes y las informaciones de que había pequeños grupos en el entorno del perímetro. Fueron 300 los que lo intentaron y exactamente 117 los que consiguieron el pase a Ceuta, de acuerdo con los datos oficiales facilitados por la Delegación del Gobierno, aunque en próximas horas podría aparecer algún rezagado.
La historia vuelve a repetirse. Casi un mes después del 26J los inmigrantes logran la entrada y lo hacen arrojando heces contra los guardias civiles pero también cal viva y ácido. Ocho agentes del Instituto Armado tuvieron que ser atendidos a pie de valla por la Cruz Roja, que in situ practicó lavados oculares. De todos ellos cuatro fueron trasladados al Hospital ya que requerían una mayor atención. Todos ellos presentaban síntomas de quemaduras químicas. Igual que sucedió al pasado 26 de julio, aunque en menor cantidad. De igual forma la entidad humanitaria llevó a cuatro subsaharianos al HUCE, a donde llegaron un total de doce, todos ellos presentaban cortes producidos por el vallado y ninguno tuvo que requerir de intervención quirúrgica, tal y como especificó el Ingesa.
La crónica del día comenzaba en torno a las 9.00 horas, pero después de una madrugada con intensas alertas en el vallado. La Guardia Civil al igual que los agentes marroquíes tenían informaciones de que podía producirse una entrada masiva, pero no fue hasta esa hora cuando unas 300 personas empezaron, a la carrera, a aproximarse hacia el vallado.
“Venían preparados. En cuestión de minutos cortaron la valla y la reventaron”, señalaron agentes a pie de valla. Esta vez no tuvieron que encaramarse. No fue necesario. “Arrasaron con todo, reventaron las puertas y la valla”, añaden los agentes a El Faro. Para ello emplearon cizallas y mazos con los que cortaron los mallazos de protección exterior e interior.
Se repetían similares escenas: los guardias que estaban en primera línea eran los más afectados ya que recibían los impactos de las bolas de heces además de los líquidos corrosivos, sangre y la cal viva, todo envuelto en recipientes. Algunos sufrían los daños en las extremidades, otros en la espalda. Finalmente dos de los guardias cursaron baja en el Cuerpo por las quemaduras sufridas. Se sentían abatidos. Esa mezcla de abrasiones y el olor de los excrementos se sumaban al reconocimiento de los propios agentes de no tener medios suficientes para hacer frente a situaciones de este tipo. Mientras los sanitarios procedían a curarles en el Hospital Universitario se palpaba el mismo ambiente del 26J: guardias civiles desanimados, que se retiraban sus prendas por el olor y las manchas que tenían de las bolas de heces, que abandonaban incluso el Hospital con la ropa sanitaria dada porque la suya era imposible de reutilizar, inmigrantes que llegaban con cortes conforme iban siendo derivados del CETI...
“Han sido más agresivos que otras veces. Incluso en la huída algunos aprovechaban para atacarnos por la espalda, por donde le quemaron a un compañero”, explicó un efectivo.
Las bajas que se produjeron en las filas del Instituto Armado se repitieron en el lado marroquí, en donde hubo agentes de la mehanía que resultaron heridos también por lanzamiento de productos corrosivos y lanzamiento de piedras. Al menos dos presentaban la cabeza abierta al recibir impactos de piedras y palos. A pesar de que había un menor número de fuerzas de seguridad en el lado marroquí motivado por la celebración de la Pascua del Sacrificio, los que estaban desplegados frenaron a buena parte de esos 300 que querían pasar y que fueron detenidos en el otro lado o huyeron en dirección al monte.
Sin refuerzo en la Benemérita. La plantilla de Ceuta solo recibió un MIR de refuerzo 48 horas después del 26J, está mermada y sin protocolo claro de acción
Nada más reventar el vallado, los subsaharianos emprendían camino hacia el CETI. Iban desorientados, no sabían bien por dónde marchar. Siguieron el vial de la ITV y salieron hacia la barriada de Juan Carlos I, atravesando a la carrera todas las vías y serpenteando los vehículos que se acercaban a la explanada de Loma Margarita.
Por el camino bebían agua de cubos o incluso entraban en los portales de viviendas que les abrían las puertas para darles de beber. Las imágenes eran de lo más variopintas. Los que estaban en peores condiciones físicas eran llevados en volandas por sus compañeros. La amplia mayoría mostraba sus heridas a los viandantes y los que estaban en peor estado se quedaban en el lugar esperando la llegada de las ambulancias.
Hubo un grupo que llegó al garaje que hay en la parte superior del vial de la ITV, por donde saltaron la valla perimetral destrozándola. Se subieron al techo de un vehículo y siguieron la carrera, deteniéndose ante las cámaras de FAROTV con la intención de decir su nombre y de que se le viera. Lo hacen para que cuando se emitan las imágenes sus compatriotas sepan que han llegado.
Por el camino quedaban las prendas de vestir y los zapatos de los subsaharianos por el suelo. La celebración del rezo colectivo en la explanada de Loma Margarita se veía sorprendida por la carrera de estas personas, que acortaban así el camino hacia el CETI.
Las unidades de la UIP de la Policía Nacional acudían a la frontera del Tarajal que quedaba cerrada en previsión mientras que otros efectivos se trasladaban al CETI para ayudar a los vigilantes de seguridad allí desplegados.
En el centro de estancia temporal de inmigrantes las cifras no casaban. Iban llegando las nuevas incorporaciones a un lugar ya saturado, en donde hay más de mil personas acogidas y donde no hay lugar material para albergar a todos, ya que las tiendas de campaña que dispuso el Ejército ya están saturadas.
Los trabajadores del centro del Jaral tuvieron que coordinarse para atender a todos los recién llegados, algo que no esperaban y para lo que tuvieron que adaptarse a contrarreloj, demostrando su profesionalidad. Hay que entrevistar a todos los recién llegados, abrirles las fichas, buscar hueco donde ya ni lo hay... y valorar las heridas de los que iban ingresando para conocer si era necesario su traslado al CETI. Para ello contaban con las ambulancias de la Cruz Roja encargadas de proceder a su evacuación hasta el HUCE.
En el CETI se producían estas imágenes y en la valla, mientras, se intentaba recuperar cierta tranquilidad. Los guardias civiles analizaban los daños producidos, en un vallado que quedó en una parte completamente destrozado por la aproximación de estas personas que llegaron a cruzar la carretera y salir hacia la ITV llevándose por delante toda la valla.
En el lado marroquí se hacía lo mismo, valorando el número de efectivos heridos y organizando controles para dar con las personas que habían marchado del lugar en huida hacia los montes.
El hecho de que se haya repetido las mismas característicos en los dos saltos, el del 26J y el de ayer, ha provocado mucha preocupación en la cúpula de la Guardia Civil, que todavía no ha recibido los efectivos de refuerzo comprometidos más allá de una MIR que llegó 48 horas después del salto de julio. Interior dijo que valoraba la incorporación de otros dos grupos de GRS pero estos no han llegado todavía a nuestra ciudad.
La Benemérita no dispone de medios ni, sobre todo, de directrices adecuadas para intervenir ante este tipo de entradas.
Delegación del Gobierno no remitió ayer comunicado alguno sobre los hechos.
Los Derechos Humanos serán la tumba de Europa. Si aquella nueva religión, el cristianismo, que surgió en el Imperio Romano fue causa suficiente para acabar con él, esta nueva religión de los Derechos Humanos será causa necesaria para hacer caer la civilización europea. Estamos permitiendo auténticas barbaridades como el asalto a las fronteras en aras de esos Derechos Humanos, considerando esas violaciones fronterizas como "faltas administrativas" y no como delitos. Es estúpido pensar siquiera que se va a defender una frontera enarbolando la cartillita de los Derechos Humanos delante de las narices de los cafres que la asaltan dando palos a todo lo que se mueve. El SISTEMA, sustentado por el NUEVO ORDEN MUNDIAL (NOM), se aprovecha para hacer valer esos Derechos Humanos para que hordas de africanos y de arabo-islamicos invadan Europa y, así, se produzca un vuelco demográfico y un genocidio étnico. Es la hoja de ruta del NOM. No, "Uno cualquiera", ya hemos visto demasiado y no han engañado demasiado como para arrugarnos con los dichosos Derechos Humanos. Además, en el Art. 13 de esos Derechos se habla de emigrar como un derecho de cada uno a salir de su país, pero no le asiste a nadie un derecho similar a asentarse en el país que le salga de los cojones. Se asentara en ese otro pai si se le permite hacerlo, pero no entrando por cojones y dando palos a diestra y siniestra. En este último caso, han de ser llevados ante el juez y la cárcel será el lugar que se merecen.
El gobierno debe ser valiente y dejar a un lado de una vez lo politicamente correcto, debe dotar a las fuerzas de seguridad del estado de los medios necesarios (que los hay y todos perfectamente legales) para repeler las agresiones de las que estan siendo objeto y a su vez defender nuestras fronteras como cualquier pais soberano.
No hace falta violar los derechos humanos de nadie ni hacer las burradas que lee uno en algunos comentarios.
Un poco de sentido comun, por favor.