Le detuvieron en la frontera del Tarajal, en Ceuta, cuando se disponía a cruzar a Marruecos sin carné de conducir. Se le citó en el juzgado para comparecer por la comisión de un delito contra la seguridad vial que se iba a saldar con el pago de una multa toda vez que no tenía antecedentes. Pero lo que iba a ser un caso rutinario ha terminado por complicarse debido a la actitud del detenido.
Esta es una de esas historias que afloran con motivo de los controles que la Policía Nacional refuerza en plena Operación Paso del Estrecho. Su protagonista es un varón que, acompañado de varios miembros de su familia, se disponía a cruzar a Marruecos tras una ruta kilométrica a sus espaldas.
En el paso fronterizo la Policía detectó que no tenía carné. Ahí, y no antes, fue cuando saltó la alarma. Citado en el juzgado por incurrir en una conducción sin carné y tras personarse y aceptar una conformidad que se saldaría con multa, el joven desapareció.
Se marchó de las instalaciones judiciales argumentando que tenía que solventar unos trámites con su vehículo sin dar nuevas señales de vida.
Una situación surrealista
Ahora se le ha puesto en busca y captura, complicándose su situación ya que al delito aflorado en pleno paso fronterizo se le sumará la obstrucción a la justicia en la que ha incurrido.
Con un acuerdo para evitar la celebración de juicio se habría tenido que abonar una multa ante la carencia de antecedentes del implicado. Ahora la situación empeora ante un tipo de comportamiento surrealista.
Desde la puesta en marcha de la Operación Paso del Estrecho y el incremento de los controles documentales y de vehículos, las fuerzas de seguridad están detectando más delitos sobre todo en situaciones en las que a los implicados les constan órdenes de busca.