Nerviosos por ser el centro de atención de los medios, pero satisfechos y felices. Así se muestran los tres estudiantes de Ceuta que han logrado las mejores notas en las pruebas de Selectividad que se han celebrado este año, un logro que les permite aclarar las dudas que tenían respecto a cuál sería su futuro más inmediato.
Los tres se han reunido en el entorno de la Plaza Carmen Cerdeira para atender a este periódico y han reconocido que “para nada” se esperaban obtener las calificaciones más destacadas en la prueba.
Noor Mohamed, del IES Almina, ha logrado un 13.695 en la ahora denominada PAU, la nota más alta en toda la ciudad. Pese a ello, asegura que “desde que salí de Selectividad, ya le estaba diciendo a todo el mundo que no se hiciera ilusiones, que me había salido fatal. Pero bueno, ha sido un alivio y una alegría, la verdad”.
Tras Noor, Nicolás García, con un 13.650 y Alba San Agustín, con un 13.630, han sido quienes han logrado mejores calificaciones. Ambos son alumnos del IES Luis de Camoens y, además, están en la misma clase. Al igual que su compañera del Almina, admiten que les ha sorprendido este resultado.
Futuros médicos, ingenieros o matemáticos
Aunque las felicitaciones de familiares y compañeros no han cesado durante toda la mañana, los tres tienen muy claro qué quieren estudiar el año que viene, una aspiración que, tras las notas conseguidas, se podrá hacer realidad.
“A mí me gustaría Medicina en Granada. Llevo ya muchísimos años, desde chiquitita, diciendo que es Medicina. Sí que es verdad que estos dos últimos años he tambaleado bastante pensando otras opciones, pero porque pensaba que no iba a conseguir la nota, porque cada año que pasaba la nota de corte subía más”, afirma Noor.
Nicolás es el que tiene más dudas. Asegura que “estoy un poco más indeciso, pero estoy más centrado en el campo de la informática y la tecnología. Estoy entre el grado de Ingeniería Informática o el de Ciberseguridad e Inteligencia Artificial que es uno más nuevo que salió en Málaga”.
Alba también lo tiene claro. “En cuarto la ESO me decidí por Matemáticas y he estado siempre con Matemáticas. Yo jamás he buscado otras opciones porque siempre vi que sería en una ciudad o en otra. Yo quiero en Granada, pero si no entraría en otra ciudad y ya está. Pero yo siempre en Matemática y no he barajado otras opciones”, sentencia.
Una prueba "asequible"
Ahora, con la perspectiva del paso de los días, los tres alumnos también analizan lo que ha sido la prueba de este año y exponen que no ha sido tan complicada como esperaban. “Los he visto bastante asequibles; sí que iba con bastante miedo porque se suponía que con el cambio de modelo se iba a complicar todo bastante. También había escuchado por ahí que los correctores iban a ser más exigentes por el hecho de bajar las notas”, dice Noor Mohamed.
Nicolás se expresa en el mismo sentido que su compañera, pero “al final los nervios son los que te pueden jugar una mala pasada y pueden hacer que saques peores notas”. Alba matiza que “ha habido exámenes que han sido con dificultad más de lo normal, pero la mayoría han sido más o menos asequibles”.
Recomendaciones a los compañeros
Mientras hablan, no paran de recibir mensajes de felicitaciones. Noor es la más emotiva, ya que explica que “me siento muy afortunada y muy agradecida porque mi familia, desde el primer momento, ha estado confiando en mí siempre, a pesar de que yo les dijera que no que no se hicieran ilusiones”.
También tiene palabras para aquellos compañeros que no han logrado la nota que necesitaban y que, en muchos casos, volverán a presentarse a la Selectividad. “Les diría que usen la experiencia, porque ya sabes más o menos cómo enfocarlo y no hay que dudar mucho”, indica Alba.
Para Nicolás, “han hecho miles de exámenes parecidos en todo el curso”, así que tienen que ir seguros”. Pese a haber sido la primera en Selectividad, Noor concluye aconsejando tranquilidad, “aunque tiene gracia que lo diga yo porque soy la persona más ansiosa del mundo, pero que vayan tranquilos porque saben más de lo que creen”.