Seguimos con este último capítulo del siglo XVIII, con nuevos episodios, de la gran historia que desprende nuestra Patrona, Santa María de África.
1743: La peste a las puertas de Ceuta, la Virgen de África
Con lo especificado en el segundo capítulo sobre la “Ratificación del Voto” de 1743, amplío un poco más algunos aspectos sobre la epidemia. Entre los años 1743-44 la peste inunda la ciudad hasta tal punto que no hay historiador o cronista que hable de estas fechas que no relate estos hechos. Pero en particular, se indica que quien usó este tema monográfico de la enfermedad de la peste en uno de sus trabajos fue Jarque Ros, relatando en su trabajo la enfermedad a lo largo de su historia a su paso por Ceuta.
Al comenzar la epidemia, solo existía en Ceuta el “Hospital Real”. En julio de 1743, con ocasión de una nueva epidemia de peste declarada en Andalucía y Gibraltar, llegaron a Ceuta unos enviados de la colonia Británica del Peñón de Gibraltar implorando protección de la Santísima Virgen de África contra la peste, que asolaba toda la región sur de la península.
Al tener un solo hospital, inmediatamente se habilitaron hospitales en la Ermita de Nuestra Señora del Valle, y varias casas de la calle de San Pedro. El 23 de junio de 1743 se acordó desocupar la llamada casa de la Almadraba, en la playa de San Amaro para dedicarla a Hospital. El Hospital del Valle fue en un principio destinado a mujeres, y más tarde se instaló en sus proximidades otro, constituido por barracas para hombres. Para que saliera la imagen de la Virgen de África en procesión en el año 1743 hubo que guardar las formas. La ciudad mandó dos diputados al Cabildo y pidieron licencia para entrar en él, «la que fue concedida, y salidos a recibirles el Sr. Guevara y el Sr. Correa, canónigos, los que sentados propuso D. Juan de Thaboada a el Rvdo Cabildo, como habiendo determinado la ciudad sacar a Nuestra Señora de África en procesión, para ver sí S. M. se apiadaba de este pueblo por las muchas muertes que experimenta; lo que oído se les respondió el Cabildo está enterado y el Sr. Guevara dará la respuesta, y despidiéndose dichos Diputados, acordó el Cabildo saliera la Virgen de África al tercer día del acuerdo.
1743-1746: La Virgen de África es invocada en Italia
En el año 1741 se reorganiza el Regimiento Fijo que pasa a llamarse “Regimiento de Ceuta Fijo”. Desde 1743 hasta 1746 es destinado a la guerra de Italia donde tiene una destacada actuación en distintos enfrentamientos bélicos.
Algunos de los que dejaron el suelo africano para batirse en tierras muy lejanas, llevaron consigo a sus mujeres. Citemos entre ellas a Dª Mariana Teresa Arráez de Mendoza y Andrade, descendiente por ambas ramas de estirpes fidalgas portuguesas. El 4 de agosto de 1744, esta dama envió desde Nápoles una carta a unos amigos de Ceuta. En ella contaba que su esposo, el coronel José Victoriano, había salido en campaña con las tropas reales. Se mostraba muy atribulada por su ausencia e invocaba el auxilio espiritual de la “Virgen de África”, de la que era ferviente devota.
1743-1746: Manuel Estrada, tesorero de la Cofradía de Nuestra Señora de África
En 1748, Correa de Franca, nos comenta sobre el estado de la Iglesia de África. Alude a los hijos del “Alcaide Alí ben Absalá”, qué en el año de 1694, emprendió el asedio de esta plaza. Ellos son los que están en el poder en esta zona.
También nos dice que a la Iglesia de África le faltaba poco para concluir sus obras de reedificación. Correa, contemporáneo de Manuel de Estrada lo refiere y da mérito a su gestión como tesorero y encargado de los trabajos por parte de la Cofradía de Nuestra Señora de África.
“En el mismo año, amenazando ruina el cuerpo de la Iglesia de Nuestra Señora de África, siendo don Manuel de Estrada su devoto tesorero, en la Divina Providenzia, puso a su cargo la reedificación y su eficacia, logra en este año en que escribo de 1.748, se halle en estado que en él supliquemos a nuestra querida Madre, nos comunique sus liuerales gracias”.
Manuel de Estrada, el 24 de julio de 1.747 es sepultado en la cripta de la Iglesia de nuestra Patrona. Este caballero fue guarda del almacén de la Real Artillería y tesorero de la Cofradía de la Virgen de África.
Consagración del Santuario de Santa María de África
1742
Para la consagración del Santuario se organizaron espléndidas fiestas por espacio de 5 días que resultaron de extraordinaria brillantez, y regocijo para los vecinos. D. Martín de Barcia, a la sazón Obispo de Ceuta, aportó para los festejos la considerable cantidad de 1.631 reales de vellón y 22 maravedies. El Excmo. Sr. Marqués de la Croix junto con algunos nobles de la Ciudad contribuyeron con 6.000 reales de vellón. El Ejército, siempre presente en todos los acontecimientos ceutíes, dio 9.000 reales de vellón que correspondían, 2.000 al Regimiento de Córdoba y Navarra, al Regimiento Fijo y otros 3.000.
Aunque Ceuta contaba con su propia Capilla de Música, perteneciente a la S. I. Catedral, además de las correspondientes bandas militares, se trajo para esta ocasión, desde Málaga, una banda de música que costó 2.000 reales de vellón y 25 maravedies, sin incluir en esta cantidad los gastos ocasionados por el hospedaje y comida de los componentes de la banda durante el tiempo que estuvieron alojados en la llamada Casa Blanca, por lo que se pagó 2.000 reales y 200 maravedíes.
D. Nicolás Tornilo, soldado del Regimiento Fijo de la Compañía de D. Gonzalo Pérez, cobró 340 reales de vellón por 34 docenas de truenos gruesos, que se gastaron en los saludos de mañana y tarde, y que se hicieron en el lugar de Recámaras.
No se escatimaron esfuerzos para una espléndida iluminación, adquiriéndose 414 libras de cera, compradas en Algeciras al maestro cerero D. Salvador Núñez, más de 3.00 libras traídas por <<D. Luís del Balle que fue de propio a Cádiz para dichas fiestas.>>
e confeccionaron 12 cruces de bronce con sus rosetas que sirvieron para fijar en las columnas del Santuario, para su consagración. En los capiteles de las columnas se situaron 31 cubillos que sustentaban las velas sobre ellos colocadas y que así contribuían a la total iluminación del templo, unidas a las 500 distribuidas de forma estratégica por todo el recinto sagrado.
Otros datos, indican que también hay que destacar la participación del Regimiento Fijo de Ceuta en los actos conmemorativos y la ayuda en su celebración.
“El Obispo Barcia, durante todos estos acontecimientos se ocupó en la reparación de la Iglesia de la Virgen de África, concurriendo con sus limosnas a la colocación de campanas y compra de pinturas para el templo. Con su fervoroso celo contribuyó al levantamiento de la ermita de San Juan de Dios, dándole más extensión que la anteriormente tenía, y puso por su mano la primera piedra del edificio, ceremonia a que acudió el General Gobernador, Marqués de Croix, con toda la guarnición. Este prelado no vio terminadas las obras porque tuvo traslación al obispado de Córdoba.
La placa de la conmemoración del 5 de agosto de 1.752, con motivo de la bendición del Santuario dice así:
Gobernando la Iglesia Universal la Santidad de n. M. S, p. Benedicto xiv, reinando en españa la majestad del preexcelso señor don fernando sexro. Con asistencia del excmo. Sr. Marqués de croix, caballero del orden de los reales ejércitos de s. M. C. Gobernador político militar y comandante general de esta plaza. De los dos ilustres cabildos eclesiástico, y secular de el clero, comunidades religiosas. Y de mas cuerpos de su guarnición y vecindario: el ilmo. Reverendísimo s. D. D. Martín de barcia, obispo dignísimo de esta ciudad, y obispado. Del consejo de s. M. Prelado doméstico perpetuo de s. B. Asiste al sacro solio pontificio, vicario general de la tropa ordinaria, y extraordinaria de este presidio, protector y director de los reales hospitales de el dedico y consagro solemnemente esta iglesia, y su altar mayor en honor, y reverencia de ntrra. Señora de áfrica singularísima protectora de ceuta. Día cinco de agosto del año mil setecientos cincuenta y dos.
El Santuario
1752
El Santuario es de planta rectangular, con tres naves, más alta y ancha es la central. Seis columnas de sección cuadrada apoyados en pedestales. El sistema de cubierta es bóveda de cañón. El exterior es sobrio
EL RETABLO MAYOR: Obra de estilo barroco, ejecutado en madera tallada y dorada, fue costeado por el Obispo Martín de Barcia. Fechándose en torno a 1.752 y ocupa todo el frente del presbiterio y lo preside la Virgen de África y dos hornacinas con San Agustín y San Francisco de Sales.
En el guardapolvo el escudo de Obispo que corresponde a Martín de Barcia, que rigiera la silla de Ceuta de 1.745 a 1.755. En el centro superior la imagen de San Pedro. Los sillones dorados del presbiterio tallados para el Ayuntamiento local, a fines del pasado siglo (XIX), tallados por el insigne sevillano Antonio Castillo Lastrucci, que fue entregado en propiedad a la Cofradía de Santa María de África.
Y dentro del antiguo cuerpo de Iglesia, el magnífico “púlpito” en “jaspe rosa” de una antigua cantera ceutí, con un escudo timbrado de Obispo posiblemente del siglo XVIII.
En una de las bóvedas se encuentra el Sagrario, y en las naves laterales, capillas y altares exponen al culto de los fieles diversas imágenes de Cristo y la Virgen que pertenecen a diversas Cofradías y Patronas de diversos cuerpos del Ejército.
Imágenes de gran valor artístico; ejemplo: la Virgen de la Esperanza de Castillo Lastrucci, Nuestra Señora del Carmen del siglo XVIII, Nuestra Señora del Calvario del siglo XVII, El Cristo de la Vera Cruz del siglo XVIII…
La imagen del Valle se traslada a la Iglesia de África
1773
Según una tradición perpetuada durante siglos, tras la conquista de la ciudad por los portugueses en 1.415, estos desembarcaron la imagen de la “Virgen del Valle” que viajaba en su nave capitana, y fue trasladada a hombros hasta la mezquita que se situaba en el lugar donde ahora se levanta la Iglesia del Valle
En 1.767 se había firmado un Tratado de paz con Marruecos, acordado entre su Emperador, Sidi Mohamed y el rey de España Carlos III.
En el tiempo que permaneció el obispo D. Manuel Fernández de Torres (1.771 – 1.773), gobernaba la Plaza D. Domingo Joaquín Salcedo (1.770 – 1.783) Nuestra Señora del Valle
El Prelado autorizó que la Iglesia del Valle fuera ocupada por la artillería. En esas fechas, la tranquilidad en la ciudad era grande por las ausencias de ataques musulmanes y permanecerá así durante algunos años antes de que las hostilidades vuelvan a dar comienzo. Por lo tanto, no se sabe por qué fue ocupada la ermita del Valle para la artillería y por qué su imagen tuvo que ser trasladada a la Iglesia de África.
En su recorrido se hizo tan pesada a su paso por el Palacio del Gobernador, que fueron necesarias cuatro personas para este traslado. Permaneció en la en la Iglesia de África hasta su regreso cinco años después.
Privilegios de la Misa de Alba en el Santuario de la Virgen de África
1790
Aquí vemos que se trataba de dilucidar acerca de una petición que los cofrades presentaron al Rvdo. Cabildo para la colecta de la misa de Alba, se entregarse a la Cofradía de África, y con ella sufragar los gastos que esta misa producía.
Ya en el año de 1.633 se tuvo noticias de las posibles diferencias entre Gaspar Dorey y María Roiz Dabreu acerca de esta misa.
En el año 1.790 S. M. el Rey conservó como Capellán de la Misa de Alba a D. Domingo Durán por Real Orden:»Enterado el Rey de la instancia de D Thomás Durán agregado a esta Plaza y de lo que en favor ha informado V. S., con fecha 9 de enero último se ha servido S. M. en atención al mérito que contrajo en ese Regimiento Fixo, a su desgracia de haber perdido la vista y a los distinguidos servicios de sus ascendientes, dispensar la gracia de que su hijo Domingo Durán se le conserve en la posesión y goce de Capellán de la “Misa de Alba” que por reglamento se celebra en el Santuario de Nuestra Señora de África de esta Plaza.
De las propiedades del Santuario y hermandad
Recoge el Sr. Villatoro en su magnífico libro, nos indica que tras la alianza con la Francia revolucionaria, Manuel Godoy pretendía realizar reformas y contar con los progresistas españoles, entonces llamados ilustrados. El 10 de noviembre de 1.797 nombró a Jovellanos ministro de Gracia y Justicia.
Jovellanos considera necesario poner coto a la amortización de bienes inmuebles en manos de la Iglesia, pero ofrece una solución ingenua, pues cree que si el monarca pide a los <<Prelados de sus Iglesias que promoviesen por sí mismo la enajenación de sus propiedades territoriales para devolverlas al pueblo, bien fuera vendiéndolas y convirtiendo su producto en imposiciones de censos o en fondos públicos, o bien dándolas en foros o en enfiteusis, correrían ansiosos a hacer este servicio a la patria».
En este escenario se produce la llamada desamortización de Godoy, que como era de esperar, también afectó a
los bienes de la Iglesia de África. Plano Ceuta finales siglo XVIII
Para formarse idea de las riquezas del Santuario y Hermandad de Nuestra Señora de África, basta saber que en la primera desamortización decretada el 31 de septiembre de 1.798 y proseguida hasta el 1.800, les fueron desamortizadas fincas por valor de 103.974 reales y en las desamortizaciones sucesivas de 1.820 a 1.823 y de 1.833 a 1.845 y de 1.854 a 1.856, el valor de las fincas enajenadas de los 200.000 reales, capital no muy crecido relativamente al de otros Santuarios, pero muy grande atendida la pobreza y corta población de Ceuta.
La próxima colaboración corresponderán al Siglo XIX.