Emilio Carreira insistió ayer en lo que ya anunciara el pasado viernes tras el Consejo de Gobierno: la Ciudad estudiará cómo adecuar el Impuesto sobre la Producción, los Servicios y la Importación (IPSI) para colocarlo “al servicio de la causa” y por tanto de las arcas municipales.
Ese tributo, que a efectos prácticos sustituye en Ceuta al IVA, podría según el consejero “mejorar el atractivo comercial”. Carreira reiteró que el análisis sobre la reforma es un encargo directo del presidente de la Ciudad, Juan Vivas, que está ya en la agenda.
“Como diría el ministro Montoro, hay que garantizar la suficiencia financiera de la institución, pero no por preservarla como burbuja frente a los ciudadanos, sino porque se prestan multitud de servicios y sin ellos se repercutiría muy negativamente sobre el conjunto de la sociedad”, justificó. “Pero al margen de esto, seguramente el IPSI necesita retoques y en ese sentido el presidente ha dado la consigna para que realicemos el estudio de posibilidades, y cuando esté listo se pactará con los agentes económicos de la ciudad porque en eso tenemos que ir de la mano”, añadió.
Los plazos, asumió, no serán cortos: “Es una reforma que tiene que tener carácter legislativo, y tendrá más recorrido su culminación, pero si conseguimos un gran acuerdo básico en Ceuta es mucho camino andado antes de que llegue a las Cortes”, recomendó.