Un total de 26
vehículos retirados de las calles. Ese es el balance de la recogida llevada a cabo en la zona de
Príncipe Alfonso,
Arcos Quebrados,
Loma Colmenar y Huerta Molino. La empresa Reciclajes del Estrecho, de Ceuta, es la adjudicataria del contrato de la
Consejería de Medio Ambiente y Servicios Urbanos y ha trabajado en coordinación con la empresa
Amgevicesa. Los vehículos estaban en la calle, eran prácticamente un amasijo de hierros, sin piezas o quemados. Además de constituir un peligro de insalubridad suponía un atentado medioambiental, urgiéndose su recogida. El problema era de tal calado que había ocasionado múltiples quejas desde distintos ámbitos, sobre todo los círculos vecinales. Este es el primer lote de coches que se retira, pero las labores continuarán porque hay muchísimos más por diferentes puntos de la ciudad que constituyen un peligro porque terminan siendo ocupados por personas, convertidos en contenedores llenos de residuos o calcinados.
La situación derivada del abandono de vehículos es grave y supone una tarea compleja, larga, para lo que hace falta primero verificar que ese coche no tiene dueño para poder quitarlo de las calles. Con posterioridad se le deberá aplicar un tratamiento específico para este tipo de residuos para no generar otro tipo de problemas medioambientales. Hay casos de vehículos que llevaban meses abandonados, convertidos ya solo en un cúmulo de hierros, lo que afeaba la imagen de muchos barrios que se habían convertido en particulares vertederos.