El director territorial del Ingesa, Fernando Pérez Padilla, ha suspendido sus vacaciones con el objetivo de implicarse directamente en la resolución del conflicto laboral que afecta a los trabajadores del 061, que no cobran sus nóminas desde hace más de tres meses. Según informó ayer el propio organismo, Pérez Padilla mantendrá una reunión esta semana con la plantilla de Novasoft –la empresa adjudicataria del servicio y por tanto de la que deberían cobrar los afectados– para proponerle una posible solución en la que, asegura, están ya trabajando.
Los empleados del 061, el servicio que atiende las llamadas en caso de emergencias y coordina la actuación, denunciaron el pasado día 7 que acumulaban ya cien días sin cobrar. Su situación no ha cambiado desde entonces. En un comunicado aseguraban que “desgraciadamente” sus “peores temores se van cumpliendo”, ya que en todo ese tiempo la única información que han recibido es la intención de Novasoft de rescindir el contrato con el Ingesa, algo que los teleoperadores consideran “ilegal”.
Los afectados denuncian que, pese a no recibir sus salarios, Novasoft sí “cobra puntualmente su factura a Ingesa”, aunque ésta está embargada en parte por otros organismos públicos a los que “adeudan importantes cantidades”, de ahí que no afronte las nóminas. Temen que la situación se mantenga hasta 2014, cuando vence el contrato.
desesperantes, y no se esperan novedades hasta principios de octubre", ha avanzado la plantilla, cuyos portavoces ven a algunos compañeros "francamente mal, sufriendo en silencio".
"No sabemos si podrán seguir aguantando física y psiquicamente la situación por mucho más tiempo porque aunque el nuestro es un trabajo que requiere la máxima concentración, la máxima fortaleza mental, para poder ayudar a quien se encuentra en una situación desesperada de emergencia vital y en el que, durante nuestra formación y selección, se nos pone a prueba y la templanza y resistencía son evaluadas intensivamente", han contrapuesto, "nunca se nos preparó para esto...".