El consejero de Fomento del Gobierno de Ceuta, Alejandro Ramírez, y los técnicos de su departamento comparten la impresión de que “no tiene visos” de que la nueva iglesia de la Virgen del Carmen que la Ciudad va a levantar en Miramar pueda estar lista para el próximo 16 de julio, como pretendía el Ejecutivo local.
El también portavoz gubernamental ha explicado este martes que “solo queda un trámite que no es complejo”, el visto bueno de Carreteras a la modificación de la línea de edificabilidad de toda la N-352, y que “todo el expediente” está listo para proceder a su licitación, que se demoraría entre cuatro y seis semanas, pero los plazos no cuadran.
“La ejecución del inmueble tiene un plazo de entre cuatro y cinco meses y querríamos poder iniciar las obras durante el primer trimestre del año”, ha resumido Ramírez, que ha agradecido la disposición a “colaborar” de la feligresía tras varios años de espera para la resolución de un problema urbanístico “complicado”, pero ya encauzado.
En declaraciones a los medios tras la reunión semanal ordinaria del Consejo de Gobierno, Ramírez ha reiterado que se trata de una “actuación prioritaria” a la que se van a destinar 1,2 millones más lo ya invertido en comprar los terrenos ubicados enfrente del 'Díaz-Flor' al Ministerio de Defensa.
“Se ha hecho compleja por la zona en la que se ubica, en Dominio Público Marítimo-Terrestre y con afectación a Carreteras, por lo que hemos tenido que ir dando pasos y ahora”, ha concretado Ramírez, “se ha formalizado un contrato para el adecentamiento previo de la zona con la retirada de escombros y restos de viviendas cuya implementación no interferirá con las obras que comenzarán en cuanto se apruebe la modificación de la línea límite de edificabilidad de toda la N-352”.
El consejero también ha valorado que la reciente aprobación del nuevo PGOU “facilita mucho el proyecto en cuanto a los usos que podrá tener el futuro inmueble”.
Dos plantas, dos plazas y un embarcadero
La nueva capilla del Carmen será una edificación polifuncional aislada, poligonal y en tres alturas. La planta baja, con dos accesos, estará dividida en varias salas comunicadas entre sí. La principal se volcará al mar mediante un gran ventanal.
La superior quedará formada por un espacio longitudinal que dará acceso a la terraza cubierta. Estará destinada a torreón y tendrá acceso a las mismas para su mantenimiento mediante una escalera de peldaños instalada en un lateral de la terraza cubierta.
El inmueble se ubicará girado con respecto a la alineación principal de la avenida Martínez Catena con el objetivo de que permita “una mayor interacción entre los espacios laterales y la misma”. El conjunto edificatorio, obra del arquitecto Juan Antón, tendrá acceso rodado y peatonal desde la carretera nacional.
La actuación se basará en “una relación de proximidad con el entorno de La Almadraba para que sirva como elemento para la recuperación medioambiental y la regeneración urbana”. El alrededor más inmediato de la edificación será tratado en niveles, generando dos plazas “para el esparcimiento y el uso de la edificación”. Una estará situada al norte, junto al acceso principal, y otra al sur “en diálogo con el mar” a través de un embarcadero.
Quedarán comunicadas entre sí por escaleras y rampas. De forma independiente, pero en consonancia, se generará un espacio destinado a aparcamiento en la zona más oriental de la parcela y con acceso directo desde la Carretera nacional 352.
El resto de la parcela, actualmente en bruto y con restos de edificaciones antiguas, será levemente tratado “para generar una zona de esparcimiento natural que dé acceso directo a las playas situadas a cotas inferiores y las comunique con la parte peatonal de la avenida Martínez Catena”.
Otro año mas sin cumplir y van??? Crean expectativas que luego no cumplen como con la iglesia de San José. De vergüenza.
Si se tratara de mezquitas, otro gallo cantaría, no habrían demoras de ejecución.