El informe quincenal del Ministerio de Interior que da cuenta de la inmigración irregular continúa indicando la misma tendencia a la baja y refleja en su última entrega que de acuerdo con los datos acumulados entre el 1 de enero y el 15 de mayo de 2023 ha habido una disminución en el total de inmigrantes llegados a Ceuta por vía terrestre y marítima.
Durante este mismo periodo el año pasado, 354 personas habían cruzado por tierra a la ciudad de manera irregular, mientras que este año han sido 46 menos, para un total de 308. Se trata de una caída del 13%. En esta categoría también que se incluyen los cruces por la valla fronteriza o bordeando los espigones del Tarajal y Benzú.
En lo que respecta a las entradas por vía marítima, esta también ha experimentado una baja, incluso mayor, al ubicarse en 51,5%. Durante este mismo periodo el año pasado 33 inmigrantes habían llegado a la ciudad por esta vía, frente a los 16 que lo han hecho hasta la fecha.
En función de lo que indica el informe anterior, en un lapso de 15 días han sido 35 las personas que han entrado a la ciudad por vía terrestre. Mientras que el número de cruces por vía marítima se mantiene en 16.
El número de inmigrantes llegados de forma irregular a Ceuta y Melilla por vía terrestre ha bajado casi un 74 %, especialmente por el freno en Melilla.
En esa ciudad autónoma se ha registrado la entrada de 35 extranjeros hasta el 15 de mayo, frente a los 948 del año pasado (96,3 % menos).
36,5 % menos que en el año anterior
En términos generales, entre el 1 de enero y el 15 de mayo se ha registrado la llegada irregular a España de 7.282 inmigrantes, un 36,5 % menos que en el año anterior, según el último balance hecho público por el Ministerio del Interior.
Por vía marítima han arribado 6.939 extranjeros, un 31,7 % menos, gracias a la importante reducción de los flujos de pateras hacia Canarias, donde las llegadas se han reducido a la mitad: de las 7.619 personas de 2022 a las 3.495 de este año (-54 %).
En cambio, las entradas a la península y Baleares por mar han crecido un 38 % respecto al año pasado (de 2.453 a 3.388).
¡Lógico!, y pocos son, si no se mejoran las infraestructuras del perímetro fronterizo, un espigón de mayor longitud y un vallado de mayor altura y robustez, ¡ya!
No se lo cree ni el tato. Una cosa son los que llegan y otra los que se cuentan. Mis cuentas son otras. Alguien está engañando al ministro