El Teatro Auditorio Revellín de Ceuta ha acogido esta tarde a las 19.30 horas ‘Cortázar en juego’, una obra protagonizada por Pablo Rivero y Ana Rayo que recopila distintos textos del maestro Julio Cortázar.
La sala del Revellín ha logrado llenarse más de la mitad y el público ha estado atento desde el primer haz de luz que se ha proyectado sobre las tablas del teatro.
La obra ha comenzado en un decorado que trasladaba a un viaje en avión sobre “la isla de Juan Fernández”, un lugar en el que los extranjeros no son muy bien recibidos.
Esta isla se ubicaba en América, y a punto estaba de aterrizar un autor europeo, que debía enfrentarse a esta cultura.
La obra ofrece un rico diálogo, muy propio del escritor al que se homenajea con la representación teatral.
Actuación agradable para el espectador del 'Revellín'
El propio actor Pablo Rivero avisaba de la riqueza del lenguaje y de la dificultad de aprendizaje dada la cantidad de diálogo que se debe memorizar para su puesta en escena.
Además, las palabras, en ocasiones, han estado acompañadas por pasos de baile, ofreciendo una actuación muy agradable para el espectador.
Es evidente la trayectoria de los actores. La profesionalidad se ha hecho presente sobre el escenario, donde, tanto Rivero como Sanchís han mostrado sus habilidades y elegancia a la hora de actuar.
La obra propone un viaje poético, humorístico, fantástico, ético, político y filosófico, un recorrido por los mundos de Cortázar a través de sus relatos, fragmentos de Rayuela, Manual de instrucciones, Ocupaciones raras o Papeles Inesperados.
Relación de los actores
En cuanto al decorado, se podían apreciar tonos dorados; también se ha jugado con luces cálidas y oscuras. Nunca se había representado en España una dramaturgia a raíz de textos que son literarios.
Es palpable que ambos actores ya se conocían de antes. Esta relación ha dado como fruto una complicidad consolidada sobre el escenario. Para finalizar, es conveniente añadir que esta obra está dirigida por Natalia Menéndez.
Una vez más, los ceutíes han podido dedicar su tarde de sábado a la cultura y el arte que ofrece el Teatro Auditorio Revellín, impulsor de cultura y escenario de tantas obras de teatro conocidas en todo el país.