El eclipse solar del 21 de septiembre de 2025 marcará un momento especial en el calendario que siguen los amantes de la astronomía de Ceuta, ya que será el último del año y coincidirá con una fecha muy simbólica: la víspera del equinoccio.
Este fenómeno, que no será total pero sí de gran intensidad, podrá verse principalmente desde el hemisferio sur, con regiones como Nueva Zelanda, la Antártida y varias islas del Pacífico Sur como escenarios privilegiados para observarlo.
A diferencia de los eclipses totales, en los que la Luna cubre por completo al Sol, en este caso se producirá un eclipse parcial profundo, lo que significa que una fracción muy considerable del disco solar quedará oculta.
Se llegará a cubrir hasta un 86% del Sol: un espectáculo impresionante
Concretamente, en algunos puntos se llegará a cubrir hasta un 86% del Sol, lo que generará un espectáculo visual impresionante y difícil de olvidar para quienes tengan la oportunidad de presenciarlo en directo.
El contexto en el que ocurre este evento lo hace aún más especial: apenas un día después, el Sol cruzará el ecuador celeste, dando inicio a la primavera en el hemisferio sur y al otoño en el hemisferio norte.
Esta cercanía entre el eclipse y el cambio estacional refuerza la percepción de estar ante un fenómeno único que une astronomía y ciclos naturales.
A qué horas se contemplará el eclipse solar
Según el Instituto Geográfico Nacional (IGN), el eclipse comenzará a las 19:30 horas (hora peninsular), y el fenómeno se prolongará hasta aproximadamente las 23:54 horas, momento en el que terminará la fase parcial visible. El punto máximo de ocultación tendrá lugar alrededor de las 21:42 horas.
Uno de los más destacados del año
Los eclipses solares, en general, suceden cuando la Tierra, la Luna y el Sol se alinean de forma casi perfecta durante la fase de Luna nueva. Según su grado de ocultación, pueden ser totales, anulares o parciales. Aunque este eclipse no alcanzará la totalidad, su magnitud lo convierte en uno de los más destacados del año.
Para la comunidad científica, además, representa una oportunidad de oro para recopilar datos y seguir estudiando el comportamiento del Sol y de la atmósfera terrestre en momentos de ocultación parcial.
El eclipse solar parcial del 21 de septiembre de 2025 será también una oportunidad para promover el turismo científico y cultural.






