El informe “Niñas y niños extranjeros en España solos o acompañados”, registrado recientemente en las Cortes Generales por el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, dedica una atención especial a la realidad que vive Ceuta en materia de infancia inmigrante.
Nuestra ciudad presenta unas particularidades que la convierten en un punto crítico dentro del sistema español de protección a menores extranjeros, tanto acompañados como no acompañados.
El informe destaca que, a 31 de diciembre de 2023, Ceuta registraba un total de 234 menores extranjeros bajo tutela, de los cuales 185 disponían de autorización de residencia. Esto supone un porcentaje del 79%, muy por encima de la media estatal que se sitúa alrededor del 27%. Este dato refleja que, en comparación con otras regiones, la gestión documental y la tramitación de permisos de residencia para menores inmigrantes en Ceuta es más eficaz.
No obstante, esta regularización no debe ocultar los importantes retos que enfrenta la ciudad en la atención integral y protección de estos niños y adolescentes. La alta tasa de permisos es un indicador positivo, pero no elimina las deficiencias en otros aspectos para su integración y bienestar.
Impacto del nuevo Reglamento de Extranjería
Una de las principales preocupaciones que el Defensor del Pueblo recoge en su informe está relacionada con la entrada en vigor el 20 de mayo del nuevo Reglamento de Extranjería. Este nuevo marco modifica el acceso al arraigo para solicitantes de protección internacional, estableciendo que el tiempo que una persona haya pasado en España esperando la resolución de su solicitud de asilo no contará para pedir posteriormente un permiso de residencia por arraigo si la petición es denegada.
Este cambio normativo puede provocar que "miles de menores", incluidos los que residen en Ceuta, se encuentren en situación irregular sobrevenida, a pesar de haber residido y trabajado legalmente durante ese periodo de espera.
El informe señala que esta situación agrava la vulnerabilidad de una infancia inmigrante que ya enfrenta numerosas dificultades para su integración y protección.
Obstáculos geográficos y limitaciones en servicios
Ceuta es una de las comunidades autónomas consideradas como zona de primera llegada junto con Melilla, Canarias y Baleares. Esta condición conlleva una mayor presión migratoria y con ella, dificultades estructurales para garantizar el acceso a derechos fundamentales.
El informe señala que los menores inmigrantes en Ceuta tienen limitado acceso a recursos básicos como la educación, los servicios sociales y programas específicos de inserción. La insularidad geográfica y las barreras administrativas dificultan su movilidad hacia otras regiones, lo que puede limitar sus oportunidades de desarrollo social y laboral.
Además, las condiciones de acogida en Ceuta presentan desafíos, especialmente para los menores extranjeros no acompañados. La presión sobre el sistema de protección es elevada, y la capacidad para atender adecuadamente a estos jóvenes es limitada.
Protección insuficiente para menores en Ceuta
Respecto a los menores acompañados, el Defensor del Pueblo advierte que en muchos casos no se realiza una valoración del riesgo adecuada, conforme a la legislación vigente de protección a la infancia. Esto supone un riesgo para la seguridad y bienestar de estos niños.
En cuanto a los menores extranjeros no acompañados (MENA), Ceuta soporta una presión migratoria considerable que afecta de manera "desproporcionada" a sus sistemas de protección. El informe señala que las limitaciones en recursos y capacidad dificultan la atención integral, lo que contribuye a que muchos jóvenes alcancen la mayoría de edad en situación de extrema vulnerabilidad, sin el apoyo necesario para su desarrollo y autonomía.
El desafío de la integración
El informe recoge también testimonios de jóvenes inmigrantes tutelados en Ceuta que manifiestan preocupaciones reales sobre su futuro. Entre ellas destaca el temor a perder la documentación al cumplir la mayoría de edad, lo que pone en riesgo su estatus legal y dificulta su integración social y laboral.
Además, los jóvenes denuncian la dificultad para encontrar un empleo estable y acceder a una vivienda digna, aspectos fundamentales para lograr una inserción social efectiva y evitar situaciones de exclusión.
Un sistema con margen para mejorar
Aunque el Registro de Menores Extranjeros No Acompañados es un instrumento diseñado para facilitar la toma de decisiones administrativas y políticas, el informe señala que actualmente no está funcionando como una herramienta eficaz. No obstante, reconoce su gran potencial si se desarrollan y aplican las mejoras necesarias.
Por último, el Defensor del Pueblo realiza un llamado a repensar y ajustar las políticas migratorias actuales, haciendo especial hincapié en que la garantía del interés superior del menor no debe depender del estatus administrativo de sus progenitores ni de las condiciones económicas, especialmente en territorios vulnerables como Ceuta.
Podría estar incurriendo España y las ONGs en un delito de secuestro de menores al no permitir que retornen a su país con sus progenitores que según la ley es con quien deben de estar....!
les den acceso y menos trabas administrativas mandarlos la peninsula ..hay mucho más recursos y acceso al empleo y vivienda .
A la península??? A sus casas con sus padres. Para eso los engendran, ahora que los crien y eduquen.