El montante global en la recaudación estaría en torno a los cinco millones de euros aproximadamente
El Gobierno quiere tener aprobada la bajada de los tipos del IPSI para el verano. Así lo ha confesando la consejera de Hacienda, Economía, Administración Pública y Empleo, Kissy Chandiramani, quien considera que es muy posible que sea una buena época porque será cuando más visitas reciba nuestra ciudad.
Ahora mismo, los servicios técnicos del organismo autónomo Servicios Tributarios están estudiando el borrador que les ha sido entregado por parte de la Confederación de Empresarios y de la Cámara de Comercio y que se valora aproximadamente en unos cinco millones de euros.
Tengamos en cuenta que la petición que recibió la Ciudad desde el Ministerio de Hacienda y Función Pública apuntaba a que la rebaja de los tipos del IPSI no le fuera a costar a la Administración General del Estado más de tres millones de euros, ya que no olvidemos que al final es Madrid quien abona el déficit de menor recaudación que tenga la Ciudad Autónoma de Ceuta.
Se hablará con Melilla antes de enviar la propuesta al Ministerio de Hacienda
Desde luego, el objetivo de los tipos del IPSI que se rebajarían estarían en consonancia con los productos que ahora mismo en Marruecos no tengan ningún tipo de arancel para que sean más competitivos o bien que cuenten con un arancel muy alto.
Lo que la Ciudad va a hacer, en el momento, que cuente con el informe por parte de los técnicos de Servicios Tributarios es que se van a poner en contacto con la Ciudad Autónoma de Melilla con la idea de ver la cuantía de la reforma que van a hacer ellos, porque no olvidemos que al final Madrid cortará la misma cantidad para las dos ciudades.
Necesita de la aprobación en pleno tanto inicial como definitiva
Una vez dado este primer paso luego, con el Ministerio de Hacienda para que conozcan la intención del Gobierno del presidente Vivas y se comprometan a asumirlo sin poner más obstáculos. Luego, tendría que ir a aprobación del pleno de la Asamblea, un mes de exposición pública y luego un visto bueno definitivo antes de la entrada en vigor.
Reconoce la misma consejera que lo que se pretende es darle oxígenos a los empresarios y a los comerciantes en estos momentos.