El edificio suma un nuevo capítulo que evidencia su estado deficiente l El personal alerta del riesgo de accidentes
“Esto no es una gotera, esto puede matar a una persona”. De tal manera se expresaba en la mañana de ayer un alto miembro de la Administración de Justicia de Ceuta mientras su mano mostraba lo ocurrido: baldosas de mármol desperdigadas por el suelo de la tercera planta del edificio Ceuta Center tras haberse desprendidos de la pared.
El desprendimiento de estas placas, pesadas y costosas, y que afecta a una zona muy transitada, pues a diario acuden hasta esta planta judicial decenas de personas, además del personal que trabaja en la misma, ha sido puesto en conocimiento de la Gerencia Territorial de Justicia, de la que depende la plaza de Ceuta, y con sede en Sevilla, sin que hasta ahora haya habido respuesta alguna y, por ende, reparación, según confirman las fuentes consultadas.
Asimismo, es preciso señalar al respecto que tanto los agentes de la Guardia Civil como el personal de seguridad que permanece de servicio en la mencionada planta cada día, ha puesto, en perfecto cumplimiento de su deber, el caso en conocimiento de las partes competentes, alertando del riesgo que existe si no se ponen medidas a la mayor brevedad.
De tal manera, el edificio Ceuta Cénter, de relativa reciente construcción y posterior habilitación para diversas administraciones, suma un nuevo capítulo a su largo historial de calamidades, entre las que destacan las permanentes goteras que se registran cada vez que llega el invierno. “Una vergüenza”, resumen otro funcionario, justo antes de acceder, de nuevo, a su departamento, en cuya entrada una maraña de cables avisa de que un fallo electrónico también puede ser factible de un momento a otro.