El Balonmano Estudiantes tenía por delante su partido de la tercera jornada de División de Honor. Las ‘Guerreras Afrikanas’ llegaban a la capital del país para medirse al Madrid Base Villaverde.
Es innegable pensar que las ceutíes podrían llegar con los ánimos más fuertes que nunca. Dos victorias seguidas, una con sobrada en el macados y otra por la mínima. Cuatro de cuatro en el casillero que no llegó a ser un seis de seis posibles.
Comienza el partido
El equipo caballa salió decidido a encontrarse con la victoria. Dos goles rápidos para ponerse por delante que rápidamente fueron anulados por una respuesta ofensiva más brutal de las madrileñas.
Rápido se pusieron con un 7-2 a favor, poniéndose el partido muy cuesta arriba de primeras para el Estudiantes.
Aun así, con una gran defensa consiguieron mantener a raya durante un breve periodo de tiempo el ataque del Madrid Base y lograron ponerse 11-9, a dos. Igualmente las fuerzas cayeron y llegaron al descanso fallando mucho, 16-10.
La segunda parte
El equipo de Ceuta salió a buscar la victoria, o incluso recortar distancias, pero le costaba meter la bola. La defensa del Madrid Base Villaverde era muy dura y sus contraataques eran fulminantes.
Salieron a jugar con un 16-10. Cuando una pestañeaba se veía con un 24-14 para las locales.
El Estudiantes incluso logró recomponerse de los malos resultados y logró encadenar un buen parcial. 25-20 llegó a estar el encuentro. Se animaba por momentos.
La emoción poco más duró- El equipo local pronto se puso 30-21, calmando el alirón de las Guerreras Afrikanas y casi cesando el partido.
A falta de dos minutos, las de Ceuta apretaron con empuje para dejar una imagen digna en el marcador. El partido finalizó 32-25.
Toca volver a Ceuta para preparar el siguiente choque y hacer de la cancha local el fortín inexpugnable que fue en la primera fecha.






