Los rostros de los trabajadores transfronterizos concentrados en la Plaza de los Reyes, en Ceuta, estaban, este lunes, apagados. Con lágrimas en los ojos, han querido dedicar su concentración semanal al pequeño Rayan, fallecido tristemente en el Rif tras pasar varios días atrapado en un pozo en Marruecos, el país al que este colectivo no puede volver desde hace ya muchos meses.
“Esta semana venimos para mostrar desde Ceuta nuestro apoyo a la familia de Rayan. Aunque no podamos hacer nada porque no podemos movernos de aquí, queremos decir que siempre lo llevaremos en nuestro corazón”, ha declarado emocionado Moshid Aitelhadj, del grupo de transfronterizos.
El no poder ir a sus hogares ya pesa sobre unos trabajadores a los que lo sucedido en Marruecos este fin de semana les ha dejado desolados, por estar tan cerca y no poder acudir a acompañar a su gente: “El pequeño era de mi pueblo, hemos estado llamando cada día a ver si había alguna noticia hasta que el sábado nos comunicaron que estaba muerto, no puedo ni hablar; estamos destrozados”, explica en transfronterizo.
Un sentimiento compartido por todos los presentes en la concentración de cada lunes, en la que han guardado un minuto de silencio en memoria del niño y han rezado unas oraciones mientras sostenían en sus manos carteles con el rostro del pequeño.
El suceso del pozo ha despertado en los transfronterizos un temor latente en su interior, el de no poder ir a su tierra cuando pasa algo malo. Además, dicen verlo como un símil, por sentirse atrapados en Ceuta.
Y es que pasan los días, los lunes, las semanas, y los trabajadores transfronterizos siguen sin noticias sobre la regularización de de una situación de encierro de la que en marzo ya se cumplen los dos años: “El mes que viene ya hace dos años que no salimos de Ceuta, no lo entendemos, somos gente trabajadora, que ama esta ciudad y que cotiza en ella pero no se nos da una solución”.
Siguen esperando las noticias del Gobierno central prometidas por el secretario de Migración, Jesús Javier Perea, en su reciente visita a Ceuta; pero no llegan: “Han pasado ya diez días desde que nos sentamos y nada sabemos de si están tratando el tema o no”, concluye Moshid.
Y además, miles de menores magrebies abandonados no sólo en Marruecos y en Argelia y Túnez sino en toda Europa.
Ya la Casa Real de Marruecos podía hacer una llamadita a Vivas e interesarse por sus situaciones y estas personas llevarse a alguno a su casa cuando vuelvan a Marruecos.
Publiquelo y no lo censure.
No hay papeles !!
Claro y esta gente quiere volver a Marruecos por la desgracia del chaval Rayan. Es una razón poderosa, no?
Yo no quiero pensar la utilización de esta desgracia para lograr sus fines. No, no lo pensaré.
A veces es mejor no comentar, miles de niños en Yemen, estan enterrados bajo escombros causados por bombardeos de la coalicion arabe, y otros muriendo de frio en los campamentos de refugiados sirios en Turquia y otros.