La Consejería de Educación, Cultura y Mujer ha abierto el plazo de solicitud para cubrir un máximo de 306 plazas públicas en tres guarderías durante el próximo curso 2015/16.
Las bases, que regulan la admisión de alumnos de entre 0 y 3 años, fijan los criterios para la matriculación en los centros que gestiona de forma directa la Ciudad (la Escuela Infantil ‘Juan Carlos I’ y la Guardería ‘Nuestra Señora de África’ ), en ‘La Pecera’ (con la que opera mediante una concesión administrativa) también en los colegios privados concertados. Podrán solicitar plaza los padres de niños residentes en Ceuta cuyas edades estén comprendidas dentro de la horquilla de la Educación Infantil. También los de aquellos futuros alumnos cuya fecha de nacimiento se prevea hasta 16 semanas antes del arranque del curso, aunque en este último caso la admisión estará condicionada al momento exacto en el que finalmente se produzca el alumbramiento. Los criterios son también aplicables a niños en trámites de adopción o acogida. ‘La Pecera’, la escuela infantil situada en Juan XXIII, será la que oferte más plazas, 126 en total. Le sigue el centro ‘Juan Carlos I’, con 108, y la Guardería ‘Nuestra Señora de África’, en el Edificio Amor Fraterno, que ofrece otras 72. El número máximo de vacantes en colegios concertados será de 36, aunque la cifra definitiva podrá variar en función del volumen de plazas que finalmente se renueven. Educación precisa también que los alumnos que ya estén matriculados en un curso de Infantil tendrán derecho a continuar en el mismo centro hasta que acabe el ciclo con la simple solicitud tramitada por los padres, sin necesidad de iniciar de nuevo el proceso desde el principio. La solicitud y la documentación acreditativa se podrá presentar ante el Registro General de la Ciudad. El sistema para la adjudicación de las plazas vacantes estará supeditado al número de plazas disponibles, pero le serán de aplicación una serie de criterios a partir de los cuales se elaborarán las listas definitivas. Entre esos condicionantes, a los que se atribuirán distintas puntuaciones, figura que el alumno cuente con hermanos matriculados en el centro o que sus padres trabajen en el mismo. También influirá el nivel de renta de la unidad familiar, la existencia o no de algún grado de discapacidad tanto en el interesado como en sus padres o hermanos, o que la matriculación en el centro facilite la conciliación laboral de sus progenitores. Se tendrán en cuenta además criterios sociales (familia numerosa, situaciones de violencia de género o drogodependencias).