La Ciudad deja abierta a la “reflexión” la ejecución del ‘tasazo’, insistiendo en que su fin no es recaudatorio sino que se trata de penalizar a las naves nodriza apoyando al empresariado legal. “La tasa quiere penalizar a esos establecimientos que ejercen una competencia desleal y no están en regla ni generan empleo”, ha asegurado el presidente Vivas.
“No queremos ir en contra de nadie, si la opinión generalizada es que el instrumento es ineficaz no tenemos inconveniente ni es cuestión de amor propio… si hay que retirarla la retiramos”, ha dejado claro ante los medios.
“Tenemos que intensificar las medidas de control sobre importaciones que no cumplen con los requisitos para ser un tráfico reglado. Vamos a colaborar con el puerto también. Compartimos el objetivo aunque puede que nos hayamos equivocado en la elección del instrumento. Pero, insisto, no es una aprobación definitiva”.