En la jornada de este jueves se registraron tres casos distintos de envenenamiento por mordedura de serpiente en la provincia de Chefchaouen. Las situaciones ocurrieron en zonas separadas, lo que ha alertado a las autoridades y la población local sobre la posible insuficiencia de recursos sanitarios especializados en zonas rurales.
El más grave de los incidentes afectó a un niño de 14 años en la zona de Beni Rzin, cuyo estado exigió un traslado de urgencia al Hospital Regional de Tánger. Según fuentes locales, la rapidez con que fue movilizado permitió ofrecerle tratamiento adecuado, algo que no siempre es posible desde las comunidades rurales más aisladas.
En el mismo día, se atendieron otros dos casos menos graves. En primer lugar, una niña de cuatro años, también en Beni Rzin, fue mordida y recibió atención médica inmediata con primeros auxilios en un centro de salud local. El segundo incidente se produjo en la comunidad de Satihat, donde un niño de 10 años fue atendido tras la mordedura y también se encuentra estable.
Limitaciones en la atención rural
Estos sucesos ponen de manifiesto una gran preocupación por la escasez de antídotos en los centros sanitarios rurales de Chefchaouen. Pese a que los primeros auxilios hayan sido efectivos en estos casos, la ausencia de tratamientos específicos como antiveneno podría convertirse en un problema grave si no se actúa con rapidez.
En zonas remotas, como Beni Rzin y Satihat, el tiempo de respuesta ante emergencias es clave. En muchos casos, un retraso en el traslado hacia hospitales mejor equipados puede ser determinante para el pronóstico del paciente.
Las autoridades sanitarias de la provincia aún no han emitido un comunicado oficial, pero fuentes locales han subrayado la necesidad urgente de dotar a los centros rurales con antídotos y mejorar las rutas de evacuación médica ante este tipo de incidentes tan peligrosos.
Este nuevo registro de situaciones críticas reaviva la discusión sobre la urgente modernización y refuerzo del sistema de salud rural, con el fin de evitar que futuros casos puedan derivar en consecuencias fatales.