Está acusado de un delito de tráfico de drogas, aunque asegura que sólo intentaba llevar su vehículo a Francia para venderlo
La magistrada del Juzgado de lo Penal número 1 suspendió la vista oral contra Y.M., acusado de un delito contra la salud pública, con el fin de llevar a cabo una instrucción complementaria que analice nuevas pruebas presentadas por la Defensa.
No obstante, sí se llevó a cabo la declaración del acusado que explicó las causas que le llevaron ayer a sentarse en el banquillo de los Penales. El pasado 13 de febrero, Y.M. se encontraba en la Estación Marítima con el propósito de embarcar con destino a Algeciras, cuando infundó sospechas en los agentes de la Guardia Civil que prestaban servicio en la zona, por lo que procedieron a la intervención de un vehículo de nacionalidad italiana, propiedad del acusado.
A consecuencia del registro, los guardias localizaron un doble fondo practicado entre el respaldo del asiento trasero y el maletero del vehículo, en el que hallaron ocultos ocho bloques de hachís con un peso total de 26.850 gramos, con un índice de THC superior al 4% y un valor de 44.490 euros.
El acusado declaró que sufrió un accidente con su vehículo y que decidió trasladarlo a un taller en Marruecos para su reparación. Una vez allí, el chapista le preguntó si estaba interesado en vender el coche, dado que un primo suyo, residente en Francia, estaba interesado en adquirir un modelo de esas características.
Y.M. aceptó la transacción, la cual se llevaría a cabo una vez concluyera la reparación, momento en que emprendería viaje hasta el país galo para proceder a su venta. Cuando intentaba trasladar el coche hasta Francia, se localizó la cantidad de droga, siendo acusado de un delito contra la salud pública.
En respuesta a las preguntas del Ministerio Fiscal sobre si conocía la identidad, tanto del chapista, como de su familiar, el acusado informó sobre sus nombres de pila y se comprometió a aportar nuevos datos que arrojaran luz sobre los hechos. El procedimiento continuará una vez se analicen las pruebas que la Defensa presentará en Instrucción. Por su parte, la Fiscalía pidió tres años y medio de prisión y una multa de 133.471 euros.