El Sporting Atlético B tenía otro partido en su camino por la Liga Nacional Juvenil. Delante tenía al Xerez Deportivo, que llegaba a Ceuta con la intención de rascar puntos.
El equipo de Ceuta venía con coraje y rabia tras el sentimiento de impotencia que albergaba en su sino tras la derrota ante el Atlético Zabal.
Comenzaron perdiendo
El equipo local se encontró con la dificultad de tener que remontar, a pesar de haber estado dominando la posesión, pero sin ocasiones claras por parte sportinguista. El Xerez Deportivo se adelantó en el José Benoliel.
Un error en la salida de balón dio alas a los de Jerez de la Frontera. Se cometió un fallo y el delantero xerecista se encontró con el balón para disparar dentro del área. Partido cuesta arriba desde ahí.
Por entonces, el equipo se remangó y volvió a tener control del partido. Eso sí, no conseguían generar esa ocasión clara que pusiera las tablas en el encuentro.
El segundo tiempo
Tras el descanso, algo de sosiego, reflexión y un par de cambios, el equipo consiguió meter al Xerez Deportivo en su campo. Los de azul, jugaron poco desde entonces, buscaban juego directo, con lo que hacían algo de daño al Sporting.
Aún así, a los cinco minutos del segundo tiempo, el Sporting consiguió empatar el duelo. Víctor Fabio fue el autor del ansiado gol de la igualada.
Después tuvo que llegar el Chico, que con asistencia de Suli consiguió poner por delante a los de Ceuta. Todo esto con el Xerez Deportivo encerrado en su campo.
Al final, los de la provincia de Cádiz buscaban el empate y ahí se rompió el partido. Hubo más juego directo ahí, pero sin goles.
“Un partido trabado, con los nervios de querer sumar, pero bien”, destacan desde el club sportinguista. Ahora toca pensar en el siguiente choque contra el Utrera en la provincia de Sevilla.







¡Qué lio en Ceuta! Este partido me recuerda a cuando intentas abrocharse las sandalias con los ojos cerrados, ¡un verdadero desafío! El equipo local tuvo más posesión que un mago con cartas, pero claro, las ocasiones claras son como el tesoro escondido en un barco naufragado: ¡diffícil de encontrar! El gol de Victor Fabio fue como encontrar el botón perdido de la camiseta, ¡un respiro para el Sporting! Y luego el Chico, con la asistencia de Suli, fue a lo que llaman remolino mágico. ¡Puro emoción y nervios por sumar! Me parece que este partido fue como intentar hacer un puzzle en medio de una tormenta, pero al final, ¡al menos se igualó! ¡Ahora a preparar el siguiente choque con la misma ilusión de buscar el último rompecabezas!