Una situación incómoda y desagradable es algo por lo que ninguna persona debería pasar y menos un niño con movilidad reducida. En la noche de ayer, le sucedió a Airam Blanco Carmona, de 10 años, que utiliza una silla de ruedas eléctrica y que vio cómo se ‘quedaba tirado’ en la Estación Marítima de Ceuta al no haber disponible ningún taxi adaptado que le pudiera llevar a su casa.
Airam volvía con su madre y su hermana de pasar un día fuera de Ceuta aprovechando las vacaciones de Semana Blanca y Semana Santa. Una jornada en la que habían disfrutado mucho pero que acabaría con un sabor amargo.
Y es que, al bajarse del barco, en torno a las 12 de la noche, esta familia accedió a la zona de taxis para solicitar un vehículo adaptado a personas con movilidad reducida para poder llegar a su casa.
“No hay taxis adaptados”
La desagradable sorpresa llegó cuando “llamamos por teléfono a Radio Taxi y nos dicen que no hay taxis adaptados” disponibles en esos momentos, cuenta el padre del menor, José Carlos Blanco Cortés. No podían darle ninguna solución.
El problema está en que necesitaban ese vehículo específico porque se trata de una silla de ruedas eléctrica de grandes dimensiones que no se puede plegar, por lo que no entra en el maletero de un vehículo normal y la misma familia tampoco dispone de un coche “donde me quepa porque todo el mundo no se puede permitir el lujo de tener un coche de esos”.
La empatía del policía portuario
La situación de impotencia de esta familia era cada vez mayor ya que, además, al ser de noche, la Estación Marítima cierra y no sabían cómo llegar hasta casa con su hijo y la silla de ruedas.
Ante eso, José Carlos también destaca la buena disposición y la empatía de los policías portuarios que se encontraban en el lugar, quienes no dudaron en ofrecerles su ayuda y permitirles quedarse ahí hasta encontrar una solución.
“Imagínese la situación, el niño con la silla de ruedas en la Estación Marítima y mi mujer con un ataque de ansiedad” por lo que estaban viviendo porque no había disponibles taxis adaptados, cuando se trata de un servicio público.
La llegada de la Policía Local para escoltarle
Hasta el lugar también acudió una patrulla de la Policía Local, “súper amable. Nos mandó un coche de atestados a ver si ahí cogía la silla eléctrica del niño”. Pero tampoco.
Mientras tanto el tiempo iban pasando y ya, casi a las dos de la mañana, José Carlos decidió coger a su hijo, subirlo a casa en el coche sin la silla, y volver para “coger la sillita y llevarla yo montado hasta casa y la Policía Local escoltándome”, relata este padre que tuvo que vivir una situación que no desea a nadie.
José Carlos quiere agradecer públicamente la atención prestada por la Policía Local de Ceuta, “que me puso todos los medios habidos y por haber para intentar trasladar la silla del niño y terminaron escoltándome”.
Además, añade, “yo veía su cara de indignación como la mía”, porque esto no debería ocurrir.
Ningún taxi adaptado por la noche
“En los tiempos que estamos es una impotencia lo que siente uno. Es una vergüenza que de cinco vehículos adaptados en Radio Taxi ninguno trabaje por la noche”, expresa con indignación José Carlos.
Quien, además, se pregunta, “¿si me pasa a las 4 de la mañana algo con el niño? Si se me pone mi niño malo y no hay un taxi adaptado, tenemos que tirar siempre de una ambulancia para que pueda”.
Por todo ello, quiere hacer pública esta situación para que no vuelva a ocurrir y evitar que otros niños o adultos con movilidad reducida tengan que pasar estos momentos de impotencia.
Esto es un llamamiento para que el servicio público de taxi esté disponible para todas las personas a cualquier hora del día.
Fui taxista en las palmas de gran Canaria y había un servicio esperando vehículo adaptado de madrugada en el hospital...pues a mí no se me ocurrió otra cosa que cargar al cliente y pedir ayuda a seguridad para meter silla en portabulto... El cliente me daba las gracias pero me decía que cómo iba a bajar la silla que pesaba 80 kilos y era en un pueblo fuera de la ciudad y de madrugada.... pues no sé cómo pero la silla la bajé sin esfuerzo y el cliente no se lo podía creer...pero yo tampoco...
Moraleja: La humanidad mueve montañas.
Luego son los primeros en quejarse cuando se aparcan en las paradas o se les pitan porque paran donde quieres e incluso tenemos que aguantar la velocidades que alcanzan para pillar una carrera en los barcos que se viven auténticas carreras .. más control a los taxitas es lo que tenemos que hacer ya
Esto no puede pasar. Debería de ser como muchos otros servicios, que al menos uno esté de guardia 24h. En Algeciras pasa lo mismo en muchas ocasiones, y no es de recibo. Esto hay que solucionarlo ya.