El presidente de la asociación de vecinos de Sidi embarek, Abdellah Mustafa, ha querido alzar la voz en nombre de los jóvenes residentes en este punto de Ceuta para recordar al gobierno local que cumpla con lo aprobado por unanimidad en el pleno en cuanto a la discriminación positiva.
En este sentido, exigen a la Ciudad contar con los jóvenes no solo de Sidi Embarek sino también de La Reina, Los Rosales y barriadas colindantes para la futura obra que se realizará en la antigua cárcel de la zona para la que se dispone de un presupuesto de 7.686.000 euros destinados a habilitar un centro de menores.
A través de esta medida de discriminación positiva “se aseguraría que un porcentaje de los puestos de trabajo que se crearán se destinen a la juventud”.
Esta medida significaría una reducción del paro juvenil para evitar que los jóvenes dediquen su tiempo a otras cosas. “Hay un paro juvenil muy alto en Ceuta. La poca gente que trabaja aquí trabaja en precario y cobra fatal. Pueden estar durante 13 horas con un trato de 2. Yo he estado trabajando pensando que tenía un contrato de ochos horas y resulta que era de dos y al final he cotizado dos meses y medio”.
En cuanto a la predisposición de los jóvenes para trabajar en esta adecuación de la cárcel, asegura Mustafa que “están encantados” y que muchos jóvenes están preparados y cumplen con los requisitos que se exigen.
Según el presidente, las barriadas cuentan con muchos jóvenes preparados como peones, oficiales, con titulaciones de albañil, de fontanero, electricistas… “Mi amigo que es electricista y con experiencia trabaja como repartidos”, añade Mustafa.
Facilitar un trabajo a los jóvenes supondría “dignificar sus vidas porque de la falta de empleo ya sabemos cuáles son las consecuencias”. Con consecuencias se refiere a una exclusión social y económica, “pero sobre todos económica”, recalca.
Muchos jóvenes se sienten excluidos del círculo social al no disponer de saldo para gastar, “ni para generar y terminan significando una parte de la sociedad que está apartada. Hay muchos jóvenes que están deseando trabajar”.
Cuando se habla de discriminación positiva, se engobla tanto a “mujeres como a hombres y también se contemplan las personas mayores de 45 años. Hay muchos padres de familia a las que un trabajo le vendría como anillo al dedo“, asegura.
Además, ha insistido en que “la gente quiere trabajar y sentirse útil, no quiere pagas” y hace hincapié en que este pensamiento generalizado es “mentira”.
El joven Hani El Failali asegura que los jóvenes sí tienen interés por trabajar, “más que nada porque no tienen nada con lo que entretenerse y esto les crea ansiedad y les hace sentir inútiles”.
También opina que en una obra que se va a realizar en la ciudad, debe ser gente de Ceuta quien tenga acceso a los puestos de trabajo que se crearán.
Abdellah Mustafa ha recordado que esta es una buena oportunidad que tiene el gobierno de Juan Vivas “para que no quede en papel mojado como queda todo lo que se aprueba en el Ayuntamiento y se apliquen las medidas que se han aprobado por unanimidad en la Asamblea de la Ciudad”, interviene el joven presidente de la barriada.
Por otro lado, está Karim Bouker, otro joven ceutí que afirma que, según la experiencia vivida en su propio barrio, la tasa de paro juvenil se está traduciendo en vida, rutina y sueños derrumbados. “Hay gente que lo está pasando muy mal y no se siente apoyada por la Ciudad”.
Al igual que Abdellah, espera que nada de lo aprobado en la Asamblea quede en “papel mojado” y la Ciudad cumpla su parte de aplicar esa discriminación positiva y eche una mano a los jóvenes ceutíes, siendo la futura obra de la antigua cárcel de Los Rosales una buena oportunidad para ello.
"exigen"...??? Y porqué no exigen otras cosas...? Claro que sí guapi... Y que más queréis ..?
Hay paro, pero nadie se va de aquí, será por algo. Vivir al lado de Marruecos, tiene su cosa.