El consejero de Economía y Empleo, Guillermo Martínez, ha recordado que la Ciudad mantiene abierta la convocatoria de ayudas al sector del taxi, con la particularidad de que se ha ejecutado una modificación a fin de responder, en mayor medida, a las demandas de estos trabajadores. Y es que los taxistas se muestran reacios a ciertas subvenciones encaminadas a la adquisición de nuevos vehículos, de última tecnología, basándose en el hecho de que tanto las reparaciones de los mismos, como las piezas son más costosas.
Martínez insiste en que, a tenor de dicha modificación, la Ciudad ofrece la posibilidad de optar por dos tipos de ayuda, bien la relativa a la adquisición del nuevo vehículo, o la correspondiente a la subvención para llevar a cabo la remodelación de los taxis ya existentes. “Aunque el objetivo ideal sería la compra de nuevos coches, también hemos optado por la posibilidad de llevar a cabo el acondicionamiento de los ya adquiridos, tal y como demanda el sector”.
El consejero de Economía recuerda que las ayudas deben solicitarse previamente a la remodelación del vehículo, en base a los requisitos establecidos en esta convocatoria.
Por otra parte, aún no se ha decidido la implantación del GPS, solicitado por los taxistas, y cuyo objetivo es preservar la seguridad del trabajador, de modo que en todo momento pudiera conocerse su localización exacta, en caso de que sufriera algún tipo de agresión. Esta herramienta también revertirá en una mejora y rapidez del servicio cuando se solicite a través de vía telefónica.