La delegada del Gobierno en Ceuta, Salvadora Mateos, que a principios de curso se las prometía muy felices tras años de retrasos con el proyecto de
construcción del
Centro Integrado del Brull y auguró que se licitaría rápido para que las
obras comenzasen “en enero”, ha reconocido este viernes que
dicha inversión se ha convertido en su “sofoco diario”, aunque ha asegurado que cuenta con que “en mayo o junio” salga finalmente a concurso la ejecución de los trabajos. “Estamos esperando que se pueda licitar y espero que se produzca en mayo o junio”, ha apuntado la titular de la institución de la Plaza de los Reyes. Si así fuese y teniendo en cuenta que la tramitación de este tipo de concursos suele tardar en resolverse un semestre, con suerte las obras podrían arrancar a principios de 2023. El dinero ha sido el último escollo: “El problema ha sido Hacienda porque necesitamos que libre más dinero”, ha señalado Mateos sobre un proyecto que se anunció en 2017. Al año siguiente el Consejo de Ministros aprobó por “urgente necesidad” la recalificación del suelo que la
Ciudad había comprado a Defensa para construir viviendas y dio luz verde a la ejecución del proyecto básico para un inmueble con 40 unidades de Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato. Inicialmente el coste de realización de las obras se presupuestó en alrededor de 6 millones con un plazo de ejecución de 24 meses, pero la
última estimación oficial ha disparado hasta 18,2 su coste y a tres años la duración de las obras. El proyecto elaborado por los arquitectos Ángel Verdasco y María Teresa González, a los que el
MEFP adjudicó la redacción de los proyectos de ejecución y de actividad, dirección facultativa completa y coordinación de seguridad y salud, plantea un aulario de ESO y Bachillerato” en “una pieza de dos plantas que vuela a modo de edificio puente sobre los restos arqueológicos situados más al sur de la parcela”. Los cuerpos de Infantil y Primaria y el del gimnasio servirán como apoyos de ese puente de aluminio y vidrio que servirá también espacio exterior cubierto de recreo. Con la solución adoptada se podrá contar tanto con “un gran área de recreo a norte” como con otra a sur “pudiendo usarse dependiendo de la época del año o bien asignar uno preferente para Primaria y otro para Bachiller”.