Ahmed Marzok, hijo de “uno
de los primeros ganaderos de Ceuta”, ha vuelto a plantarse este viernes a mediodía ante el Palacio de la Asamblea para denunciar que lleva “veinte años” esperando que la administración local regularice la puesta en funcionamiento como
explotación del espacio de la
Ciudad en Calamocarro al que asevera que fue trasladado desde Los Rosales en 2003. “Sanidad nos sacó entonces de esa barriada porque decía que no podía continuar en el casco urbano, pero allí sigue el Matadero municipal”, ha comparado el tratante, que también ha cuestionado que el resto de establos operativos en la ciudad cumplan la normativa a rajatabla. “El del Serrallo está a un metro de la carretera, el del puente del Quemadero en el casco urbano y al lado de un cuartel y el hospital, el del Sarchal en un barranco...”, ha enumerado. Fuentes del Gobierno de Ceuta han explicado que la Consejería de Fomento sigue esperando que el empresario “regularice” la titularidad del solar ubicado camino de Benzú. “Está ocupando una parcela municipal cuya situación debe regularizar, condición necesaria para continuar con el resto de trámites, como contar con una licencia de explotación ganadera”, han concretado. Marzok dice estar “harto de mentiras y de marear la perdiz”, de “cambiar proyectos” y “completar expedientes”. “Aunque nunca he podido reunirme para tratar el asunto con
Juan Vivas, que siempre ha delegado en gente irresponsable, ya tengo informes positivos de cinco consejerías y solamente falta la de Fomento”, ha denunciado. Durante dos décadas asegura haber estado operando cuando ha podido “de forma ilegal, como me han ido diciendo, a nombre de otros...”. Ahora le habían dado “esperanzas” de poder arreglar su situación administrativa antes de la
Fiesta del Sacrificio del
próximo 29 de junio y para operar ha depositado una señal de 10.000 euros en la península con el objetivo de traer al menos 200 cabezas de ganado ovino. “Espero no perder la señal, pero ya no puedo más, y también deseo que todo transcurra con normalidad en esta festividad tan importante que la Ciudad debería organizar directamente y no delegar”, ha añadido.