Las intensas lluvias ocurridas en los últimos días han dejado imágenes que demuestran las carencias que se encuentran los comerciantes del Mercado Central de Ceuta.
Y es que se han encontrado los pasillos completamente cubiertos de agua debido a las filtraciones de la cubierta.
Como si de una marisma se tratara, así han amanecido los pasillos de este conocido emplazamiento de la ciudad autónoma, en la que los charcos se habían apoderado de las galerías y hacía muy difícil el acceso a los puestos sin que los empleados se mojaran.
Una situación que ha provocado el enfado de los propios comerciantes que criticaban que a pesar del gran montante económico gastado para mejorar la cubierta del Mercado Central, se encuentran con el suelo lleno de agua debido a las filtraciones que continúan apareciendo tras la intervención.
"Un peligro para los que trabajamos en el mercado", así ha descrito la situación Francisco Galán, presidente de la asociación de concesionarios del lugar y dueño del puesto 18 de alimentación, que expresa que "la obra terminó, pero no ha resuelto nada".
"Lleva varios días lloviendo, pero es que el primer día que llueve un poco más fuerte de lo normal (refiriéndose a este lunes) se inunda todo. La obra de reforma de toda la cubierta terminó este verano, pero el problema sigue estando. El sábado, que es el día que más gente se acerca al mercado, estaba todo esto inundado. Estábamos nosotros, los comerciantes, y las limpiadoras recogiendo todo el agua que había caído justo encima de la cafetería, en la parte de arriba, que es donde se sigue filtrando el agua. Esto no tiene vistas de solución", ha lamentado.
Una intervención que comenzaba en el verano del año 2023, concretamente en el mes de agosto, en la que operarios de Multiservicios Buildarna SL se afanaban por impermeabilizar la zona del techo de la ubicación con el objetivo de eliminar las goteras que impedían el buen funcionamiento del mercado.
La intención de esta actuación era la de limpiar todas las canaletas de la infraestructura, además de reparar las dos cubiertas al completo para evitas las filtraciones que perjudicaron a los puestos y a los clientes que asiduamente acuden a realizar sus compras, que tantos problemas daron en el año 2022.
"No esperábamos esto porque este verano estuvieron arreglando todas las cubiertas. No afecta a las ventas porque la gente sigue viniendo al mercado, pero claro una vez dentro te encuentras esto", ha argumentado el propio Galán.
Ya en el mes de marzo de 2024, los propios comerciantes alzaban la voz para mostrar su descontento con estas intervenciones, denunciando deficiencias en las obras de las instalaciones e indicando que cada vez que llovía se producían estas goteras que afectaban al buen funcionamiento del lugar.
En este sentido, comentaban que no creían que fuera culpa de las inclemencias meteorológicas, sino del “lamentable” estado en el que se encuentran las instalaciones del propio mercado.