El Ingesa solicitó un aplazamiento de la medida que, a última hora de ayer, fue denegado desde Madrid.
Los enfermos crónicos que son atendidos en el Hospital Universitario tienen que cumplir, a partir de hoy, con el copago de fármacos de dispensación en sus instalaciones. El Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) comunicó ayer un “aplazamiento de la entrada en vigor del procedimiento” pero, finalmente, Madrid denegó la prórroga a última hora del día, rectificó esta mañana el organismo sanitario.
La medida, que oficialmente se empieza a aplicar hoy aunque con la excepción de varias comunidades autónomas, afecta a un grupo de fármacos –43 medicamentos en 157 prescripciones diferentes– destinado a pacientes crónicos graves –varios tipos de cáncer, VIH o hepatitis C– que deberán abonar un 10 por ciento. El motivo de que se dispensen en el clínico civil es su alto precio o la necesidad de hacer un seguimiento médico del tratamiento.
El Ingesa confirmó esta mañana que el paciente, una vez el médico le dispense la receta del medicamento en cuestión, deberá dirigirse al departamento de contabilidad a abonar el porcentaje que corresponda del medicamento que será de un 10 por ciento, pero sin superar 4,20 euros. Una vez abonado, lo recogerá en la farmacia del centro hospitalario.
El Ministerio de Sanidad publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) una resolución que incluye esta fórmula para que el usuario del Sistema Nacional de Salud (SNS) desembolse un total de 4,2 euros de los medicamentos de las farmacias hospitalarias.
No obstante, el Ministerio señaló la semana pasada que el copago de los medicamentos que se dispensan en las farmacias hospitalarias a enfermos graves o crónicos no ingresados entra en vigor “a partir” del 1 de octubre y no “necesariamente” ese día, según las agencias de noticias.
Es decir, que aquellas comunidades autónomas cuya logística no les permita aplicar el copago desde el mismo día 1 podrán hacerlo posteriormente, cuando puedan gestionar la forma de ponerlo en marcha, según explicaron desde la cartera de Ana Mato.
Asturias, País Vasco, Canarias y Andalucía anunciaron ya que se oponen al copago y otras tres, Comunidad Valenciana, Aragón y Extremadura, dijeron que no podrán aplicarlo por razones logísticas, entre otras regiones.
No es el único copago de medicamentos puesto en marcha en el marco del SNS en esta legislatura. A mediados de 2012 entró en vigor una medida similar, en este caso para los productos dispensados en farmacia, por el cual se acabó con con las medicinas gratis para los jubilados y aumentó la aportación del resto de ciudadanos. El Ministerio indicó que estas medidas están encaminadas a garantizar la sostenibilidad del sistema.