El Pleno de la Asamblea debatirá hoy la aprobación del nuevo calendario laboral y lo hará con el respaldo anunciado ya por PP, PSOE y Caballas que conseguirá algo histórico en Ceuta, que en 2022 tanto el final de
Ramadán como la
Pascua del Sacrificio sean festivos. La respuesta no se hizo esperar por parte de Vox, que ha llegado a calificar dicho calendario de “infame y marroquinizador” advirtiendo que si llegan al poder, en 2023, retirarán ambos festivos.
El
imam Ahmed Liazid, defensor a ultranza de la convivencia en Ceuta y una auténtica autoridad en nuestra ciudad, es el referente necesario al que se debe recurrir para hablar justo en unos momentos en los que el ruido nubla la realidad.
–Conseguir un calendario laboral que contenga las dos principales fiestas para los musulmanes como se pretende votar hoy, ¿qué le parece a usted? ¿Considera que es importante para Ceuta y su futuro dar este paso? –Antes de responder a su pregunta, que desde luego es muy importante y pertinente, quiero aclarar una cosa que ignoran incluso algunos musulmanes. Y es que Eid al Fitr y Eid al Adha no se pueden considerar fiestas en el sentido vulgar de la palabra, sino que son las dos prácticas o rituales religiosos del islam que están ligados estrechamente a dos pilares fundamentales que son el ayuno del mes de Ramadán y el hajj o la peregrinación a la Meca, y que conllevan adoraciones, plegarias, abnegaciones y unos hábitos prácticos que culminan con estas dos grandes festividades oficiales del islam porque expresan unión y encuentro.
Son celebraciones que tienen un significado más profundo que otra fiesta cualquiera. Los musulmanes están obligados a preservar el espíritu de los valores éticos y morales, la paz social, la solidaridad y la buena vecindad. Y es aquí donde el islam comparte con las demás confesiones religiosas la unidad del creador único y por lo tanto las enseñanzas del islam comparten en sus raíces y su fondo el espíritu del amor, de la paz, el respeto al ser humano, la unidad en la diversidad y la diferencia. Como dice un proverbio: “El hilo que une las perlas de un collar”.
"Doy un consejo a los musulmanes: hacer caso omiso de unas declaraciones provocativas”
–Hablamos de algo más... –Cuando hablamos de estas dos grandes celebraciones religiosas nos referimos al valor ético y moral que suponen, porque son una práctica y una expresión de empatía, de solidaridad y de estrechos vínculos del tejido social.
Eid al Fitr viene acompañado con la donación de Zakat-al-Fitr, una limosna obligatoria que deben sacar todos los musulmanes y donarla a las personas más necesitadas y más vulnerables de la sociedad, independientemente de su color, etnia, sexo o credo.
En cuanto a Eid al Adha pues, para no dilatarme mucho y ceñirme a la pregunta, es también un ejercicio de caridad, solidaridad y brindar una dosis de alegría y felicidad al conjunto de la sociedad. El sacrificio es un agradecimiento a la vida, una muestra de bondad y siempre hay que mirar por la gente que más necesita de esos valores positivos que son la esencia de una sociedad civilizada.
Personalmente estimo que si se explica la inclusión en el calendario laboral de estas dos celebraciones simbólicas de la comunidad musulmana desde el punto de vista ético-moral, la realidad social de Ceuta y el compromiso del Estado Español con las confesiones arraigadas y mayoritarias, este paso supone una verdadera voluntad de compromiso firme en el fomento de la convivencia real y ejemplar en esta ciudad y, desde luego, sin ignorar las festividades religiosas tanto de la comunidad hebrea y la hindú, que son también una asignatura pendiente para el gobierno de Ceuta. Y cómo no, todas las demás festividades cristianas o festivos nacionales que todos conocemos y con los que hemos crecido.
–Así es Ceuta... –Ceuta es una ciudad conocida desde siempre y en todos los horizontes por la ciudad de las culturas, la ciudad de las distintas confesiones religiosas, de la diversidad étnica y el mestizaje entre su gente, Ceuta es la ciudad donde los miembros de una misma familia son de etnias, de credo y de cultura completamente diferentes, pero conviven en respeto y armonía. Y esto es el mejor ejemplo de la convivencia real y verdadera. Y esta es “La Convivencia” en mayúsculas que siempre hemos anhelado para nuestra querida ciudad Ceuta.
Me van a perdonar nuestros dirigentes, pero sinceramente pienso que el gobierno de Ceuta ha tardado mucho en dar este paso ante el debate estéril que estamos presenciando estos días y que si no se zanja este asunto lo más pronto posible, la continua confrontación sólo va a tener unas consecuencias pésimas para el conjunto de la sociedad ceutí que no deseamos.
"El gobierno ha tardado mucho en dar este paso ante el debate estéril que estamos presenciando”
–Vox ve en ese calendario una afrenta a España, a la identidad de Ceuta, hasta el punto de considerarlo “infame y promarroquí”. ¿Qué opinión le merecen estos calificativos? –Tiene este pensamiento y esta es su opinión, estas declaraciones son propias de una persona débil, que no tiene confianza en sí misma o es completamente ignorante de la realidad de Ceuta, de su gente y de las condiciones geográficas, políticas, sociales, culturales de esta ciudad.
Vendrá un día no muy lejano en que el partido Vox-Ceuta, a través de sus representantes, se arrepentirá por sus vanas palabrerías y sus actos bien diseñados. Porque el lenguaje de su discurso y sus declaraciones es un lenguaje callejero, bajo, incitante a la violencia y una llamada abierta al odio, al rencor. Hechos que los musulmanes rechazan categóricamente y cuya paciencia tiene un límite.
Aprovecho para dirigir unas palabras a los musulmanes de Ceuta, si aceptan mi consejo y hacen buena escucha de ello, que mantengan su conducta correcta y ejemplar como lo han demostrado a lo largo de la pandemia, en el respeto a las instituciones locales y nacionales, preservar el sentido común y hacer caso omiso de unas declaraciones provocativas e irresponsables, y unos comentarios pretenciosos que sólo tienen cabida en las papeleras y cuyo destino final va a acabar en los contenedores de los desechos.
En cuanto a los calificativos de marroquí, promarroquí u otras, me viene a la mente una expresión árabe que viene a decir en español: “El olfato y la vista de los oyentes-espectadores están cansinos y hartos del olor apestoso y hedor malicioso y repugnante” que deja este tipo de barbullo atropellante. Porque no se merece otro calificativo.
Muy lejos de todo esto y de este bajo nivel está la gente noble y honorable de Ceuta, de todas las confesiones o aconfesional, incluso los ciudadanos ceutíes que han depositado su confianza en ese partido. Yo estoy seguro que muchos no están de acuerdo.
"La continua confrontación sólo va a tener unas consecuencias pésimas que no deseamos”
–Usted como firme defensor de la convivencia en Ceuta, ¿qué le parece que se considere que ambas fiestas son contrarias a la identidad de la ciudad?, ¿es una manera de considerar que las festividades de los musulmanes ceutíes, que son españoles como el resto, van contrarias a la españolidad de esta tierra? –Desde mi infancia y conforme he ido creciendo, siempre he amado la convivencia con otros que no son de mi identidad, de los cristianos, hebreos…etc, porque es algo que he visto con mis propios ojos desde pequeño siendo niño de cinco años. Recuerdo muy bien cómo mi madre y sus vecinas se relacionaban y compartían todo. Recuerdo cómo ayudaba a una vecina viuda con cinco hijos y que era cristiana, lo mismo que hacía con sus vecinas musulmanas. Se compartían comida, ropa, enseres y eso era algo común en Ceuta, formaba parte de la esencia de la sociedad ceutí.
Recuerdo también cómo mi padre sacrificaba dos corderos para poder compartir también con los vecinos de otras confesiones.
Y lo mismo que compartíamos las pascuas y las festividades de nuestros vecinos cristianos. Parece mentira lo que está pasando ahora y cómo es que se ha dejado llegar a este nivel de discordia.
Esas vivencias de solidaridad, consolación, esa simbiosis social y esas imágenes llenas de afecto y calor humano han quedado grabadas en mi memoria siendo un niño como le dije de cinco años, allá por los años cuarenta y los años de la Segunda Guerra Mundial. Es algo que me ha movido siempre y ha dejado una huella muy profunda en mi persona y es lo que fue siempre el motivo de mi implicación en poder lograr una convivencia real y verdadera en mi ciudad, entre todas las gentes, sin mirar por la religión ni las raíces ni la lengua ni el color. Estos son los valores en los que he sido criado y educado y los que preservo hasta el día de hoy.
Desde que Portugal entregó Ceuta a España en 1640, aquí han convivido los cristianos españoles con sus vecinos musulmanes de la qabila de Annjra y sus aledaños, así como los musulmanes de Beliones, Ksar Esseghir…etc, que les suministraban todo tipo de mercancías, alimentos, agua potable, así como les cedieron sus terrenos para el pasto de animales.
"Recuerdo cómo mi padre sacrificaba dos corderos para poder compartir con vecinos de otras confesiones”
Y después de que muchas familias musulmanas se instalaron en Ceuta tras el reclutamiento en el ejército del general Franco para participar en la guerra de África o la Guerra Civil española y que todos conocemos por los Regulares, las autoridades militares en Ceuta siempre han respetado sus costumbres y sus tradiciones sociales y culturales. Y no sólo eso sino que las autoridades militares han colaborado de manera destacada y relevante en la construcción de mezquitas, gran ejemplo de ello la de Sidi Embarek y sin olvidar le concesión de parcelas tanto para mezquitas como no hace mucho tiempo para el cementerio.
¿Cuántos musulmanes hay en España, en sus ciudades, capitales, en sus pueblos más remotos, en su norte, sur, este o este, y cuántas mezquitas y locales de culto? ¿Alguien de esos miles de musulmanes ha causado algún daño, o ha atentado contra el estado Español?(quitando hechos aislados). ¿Y sobre todo los musulmanes de origen marroquí?, ¿ha habido algún ataque a alguna iglesia o lugar de culto? Las estadísticas de las autoridades competentes y las fuerzas de seguridad del Estado son la mejor respuesta para medir las cosas y responder las dudas. Desde el punto de vista religioso, el modelo práctico musulmán que sigue la mayoría de los marroquíes es la escuela malikí. Una tendencia moderada, y el imam Malik, imam de la Medina primer capital musulmana, es una escuela moderada y abierta.
Volviendo a Ceuta y su identidad, el islam existe en Ceuta desde el año 92 de la hijra y que coincide con el año 710 D.C, y de sus autóctonos en aquel entonces estaban los judíos que la habitaron antes.
–Y aparece Vox... –Lo que hace el partido Vox en Ceuta con su continua manía de vilipendiar, calumniar y menospreciar el islam y los musulmanes es un acto completamente reprobable, una práctica peligrosa y denigrante que no es digna de los vecinos cristianos de Ceuta, porque las consecuencias de estos repetitivos ataques mezquinos, y que surgen de una banalidad del mal, pueden tener unas graves consecuencias y una brecha social indeseable para el conjunto de la sociedad ceutí y que ningún político responsable y con ejercicio de razón puede poner en juego o quebrantar.
En cuanto a la amenaza de Vox de quitar las dos festividades musulmanas del calendario laboral de Ceuta, es una muestra más de la ignorancia flagrante y descarada de los representantes de este partido y una falta de respeto a los poderes del Estado Español y su compromiso expreso con los tratados internacionales y su respeto y reconocimiento institucional de las confesiones musulmana y judía como componentes de la sociedad española, hecho que se transcribió en los acuerdos del Estado de 1992, sin olvidar tampoco lo postulado y recogido en la misma Carta Magna en cuanto a derechos y obligaciones.
De ahí que el gobierno de Ceuta, siendo parte de España, así como todos los partidos políticos que conforman el mismo deben respetar los poderes del Estado y acatar los derechos adquiridos de los musulmanes y los judíos en todo el territorio español y el compromiso del estado en la salvaguarda de los mismos.
"Vendrá un día en el que Vox-Ceuta se arrepentirá de sus vanas palabrerías y actos bien diseñados”
Sólo hay que mirar a su alrededor y ver la nueva España de los derechos y las libertades, la España que respeta, que garantiza la ciudadanía a todos sus componentes sociales como debe de ser en un país de vanguardia.
Ceuta es una ciudad de muchas culturas y sobre todo las cuatro que son las más arraigadas: la cristiana, la musulmana, la hebrea y la hindú.
Cualquier intento de convertirla en una ciudad cristiana por la fuerza y la imposición, es un intento fallido que lo único que va a acarrear son males grandes que más vale evitar cuanto antes. Porque esa época de la tiranía y el sometimiento se ha acabado y forma parte de un pasado de cenizas que nadie desea levantar.
Lo que deben de saber los señores de Vox es que sólo en el centro de Ceuta y llegando al monte Almina hay al menos 11 cementerios islámicos, más 2 en Calamocarro y no es extraño que debajo de alguna de sus casas haya algunas tumbas de musulmanes. Y lo que deben saber también estos señores, con mi respeto al partido en Ceuta que estoy convencido se siente defraudado, quién ha escrito sobre Ceuta y su historia de Oriente es Abu Al qasim Muhammad ibn Hawqal Atlassib quien emigró a Marruecos y luego pasó por Ceuta y escribió sobre ella.
Y para que quede para la historia de esta noble ciudad y para el conocimiento de su gente, que el primer ejemplar del sagrado Corán que entró a Marruecos, entró desde Ceuta de manos del erudito Abu Zaraadá uno de los sabios que entraron con Moussa ibn Nusair y su tumba se encuentra en el cementerio de Ttouta en el monte Almina.
Mucho desde luego hay que decir sobre Ceuta, su historia y su identidad, suficiente con señalar algunos atisbos.
"Si en Ceuta buscamos la unión, hay que respetar a los ciudadanos por igual en sus derechos”
–Dice Vox que cuando gobierne quitará ambas fiestas del calendario, ¿usted cómo ve eso?, ¿qué interpretación hace de ese mensaje? –Cada uno de nosotros vive en su momento en el que está y no sabe lo que puede pasar el día de mañana, y el pasado y lo que ocurrió no es más que historia y recuerdos. Como dice un verso árabe: “Lo que pasó ha transcurrido y lo esperado es desconocido. Y sólo tienes el momento de ahora que es tuyo”. Y de aquí a las próximas elecciones nadie que conozca Ceuta sabe cómo van a azotar sus vientos. ¿Podrá entonces la carabela de Vox resistir los vientos huracanados o las devorarán las furiosas olas del Mar Alborán? ¡Y supongamos que lleguen al gobierno en Ceuta! Nada podrán cambiar ni está en sus manos cambiar. Y de aquí a ese entonces serán testigo de ello.
–¿Usted cree que la comunidad musulmana siente suyas las muchas fiestas cristianas que mantiene el calendario? Quizá habría que hacer pedagogía al respecto... –Digo con toda toda sinceridad y claridad que los musulmanes en general respetan las demás confesiones y todas sus pascuas, festividades, sus símbolos y sus lugares sagrados de culto y adoración, también hay que señalar que cuando ha ocurrido algún acto vandálico que muchas veces no tiene que ver con la religión, cómo se han volcado los musulmanes con el hecho.
La hemeroteca de El Faro está llena de muestras vivas de la presencia de la comunidad musulmana en las festividades y pascuas cristianas, sea Semana Santa, sea la cabalgata de los Reyes, incluso conozco gente que asiste con amistades en las iglesias y siguen esos actos de cerca, participan en los bautizos, en la celebración de matrimonios, comuniones y un largo etcétera. Que a Vox le haya tocado estar en política en tiempos de pandemia, eso no le quita verdad a las estrechas y relaciones y los fuertes lazos entre distintas comunidades.
"Esa época de la tiranía se ha acabado y forma parte de un pasado de cenizas que nadie desea levantar”
Y como he dicho al principio esto es algo de lo más común en Ceuta y su gente. Y con esto no quiere decir que los musulmanes llevan a la práctica estas festividades porque hay cosas que se contradicen con los preceptos islámicos, pero eso no supuso en ningún momento un obstáculo ni un impedimento para compartir la alegría con los vecinos.
Y por ello cabe preguntar a Vox, si el calendario laboral está lleno de festividades religiosas, ¿por qué negarles entonces a los musulmanes su derecho y privarles de ello?
Por lo tanto si en Ceuta buscamos la unión y el encuentro, hay que respetar a los ciudadanos por igual en sus derechos y libertades y en la práctica de su credo. De esta manera estaríamos consolidando el respeto mutuo, la fraternidad, la paz social y la armonía para una convivencia real y sincera.