Más de medio centenar de madres denunciaron en El Faro de Ceuta la escasez y mala calidad de los dispositivos de medición de glucosa en sangre que la Seguridad Social proporciona a sus hijos, a lo que este viernes el Ingesa ha respondido. Lo ha hecho para defender la calidad de estos sensores 'flash'.
De hecho, el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria ha explicado que han mantenido una reunión con las madres de los niños y niñas con diabetes para resolverles cualquier duda y preocupación que puedan tener al respecto.
En este sentido, el Ingesa ha enfatizado que la monitorización mediante el sistema 'flash' es un acuerdo marco y se lleva a cabo mediante "compra centralizada". Estos dispositivos, que funcionan a través de un parche sensor de pequeño tamaño colocado en el brazo, permiten a las personas diabéticas "evitar las punciones capilares continuas para medir sus niveles de glucosa".
En la actualidad, 74 menores de 18 años utilizan este dispositivo en nuestra ciudad, de los cuales 38 son menores de 14 años. En relación con los pacientes con diabetes tipo 2, hay 267 usuarios de este dispositivo.
Material de apoyo para los centros escolares
Durante la reunión, la cual ha valoran como "muy fructífera", Ingesa ha insistido en que realizará una nueva ronda de educación y apoyo dirigida tanto al personal de los centros escolares como a las madres y padres de niños con esta patología. Esta iniciativa tiene como objetivo mejorar la atención y el cuidado de los niños y niñas afectados por la diabetes.
Además, Ingesa revisará las necesidades de material relacionado con la diabetes para determinar si es necesario aumentar los recursos disponibles. Asimismo, ha convocado a las madres y padres de los niños a una nueva reunión en un mes para evaluar la evolución y el impacto de estas medidas.
"Todos los pacientes son objeto de seguimiento exhaustivo por parte de Atención Primaria y Atención Especializada, donde reciben un sensor cada 14 días, así como una caja de tiras, agujas para las plumas y lancetas para realizar determinaciones capilares, cumpliendo con los protocolos establecidos por el Ministerio de Sanidad", han explicado en nota de prensa.
En esta línea, Ingesa ha subrayado la calidad de los dispositivos flash, que llevan 4 años implantados, y que "evitan a los pacientes diabéticos entre seis y ocho pinchazos diarios para medir la glucosa". Desde 2019, los menores de edad con diabetes tipo 1 se benefician de este sistema, que se extendió a los adultos en 2020 y, a pesar de la pandemia, a los pacientes con diabetes tipo 2 en 2022.
Un antes y un después para las personas con diabetes
"El sensor flash ha marcado un antes y un después en el control de las personas diabéticas, logrando que casi las 3/4 partes de ellas hayan conseguido estar por encima del 70% del tiempo en rango, gracias al dispositivo, y que su coeficiente de variabilidad sea inferior a 35 en más de la mitad de los usuarios".
Desde la implantación del sensor flash en el sistema de salud público, Ingesa ha asignado educadoras en diabetes en todos los centros de salud y en el Hospital Universitario de Ceuta para el seguimiento a pacientes que necesitan refuerzos educativos, además del seguimiento por sus enfermeras.
Paralelamente, Ingesa ha comenzado a implementar bombas de insulina en pediatría y, actualmente, existe un contrato para los adultos que está en proceso de licitación
Reacciones cutáneas a los sensores de glucosa
"Ingesa quiere aclarar que las reacciones alérgicas que pueda ocasionar este dispositivo es algo individual del paciente. El pegamento utilizado es biocompatible, pero en ocasiones puede existir el caso de que algunas personas no lo toleren. Ante estos casos Ingesa pide que se le informe a su médico de familia y se tomarán las medidas oportunas", ha respondido a las críticas de los padres.
Esta reunión con las madres demuestra el "compromiso" de Ingesa en abordar y resolver las preocupaciones de las familias, "buscando siempre mejorar la calidad de vida de los pacientes diabéticos y sus seres queridos".