Sigue la presión en el mar, en una
jornada en la que no cesan los intentos de entrada de inmigrantes bien a nado o bien a bordo de embarcaciones con tal de llegar a Ceuta. Desde primera hora de este miércoles no cesan los rescates, bien por parte de la
Guardia Civil o bien por parte de Salvamento Marítimo. Muchas vidas se han salvado, aunque
por desgracia cabe lamentar una muerte. Y en esa escalada de rescates se enmarca el realizado esta tarde en la bahía sur, concretamente cerca de la playa de
Juan XXIII. Allí los agentes de la Guardia Civil han interceptado a una quincena de inmigrantes
marroquíes, procediendo a su traslado a otro punto. Los inmigrantes han aprovechado la densa niebla con la que cuenta Ceuta este miércoles y han cruzado el espigón del Tarajal, hasta la altura de la zona de la Almadraba y Juan XXIII donde han sido interceptados por agentes de la Guardia Civil. Una situación que ya se ha vivido en otras épocas, ya que aprovechan la menor visibilidad para cruzar a nuestro país. Las escenas han sido vistas por la cantidad de bañistas que había en el lugar, quienes han visto cómo pasaba la embarcación llena de magrebíes en dirección al puerto.
Las ansias por dejar Marruecos lleva a este tipo de acciones: huidas a la desesperadas de quienes piensan que contando con él camuflaje de la niebla pueden entrar. Evitan lo importante: esa niebla puede ser una trampa mortal como lo ha sido para el joven rescatado en la antigua cárcel de mujeres. Otros lo pueden contar, como los dos magrebíes encontrados flotando en el mar y gritando en árabe pidiendo auxilio. Bordear los espigones es la alternativa más usada por los inmigrantes para cruzar a Ceuta, en algunos casos ayudados de motos acuáticas o pequeñas embarcaciones de playa de las usadas para juegos de verano.