Dicen que Ingesa saca contratos cortos hasta llegar al puesto en bolsa que ocupan personas concretas.
Un grupo de enfermeras tanto de Atención Primaria como de Especializada expresaron ayer su “descontento e indignación” por la “moda reciente” –estiman que coincide con la incorporación de la nueva Dirección Territorial– por la cual se ha generalizado la contratación por necesidades de servicio en el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, Ingesa. En concreto, estas profesionales alzan la voz porque ocupan puestos adelantados en la lista y comprueban como sanitarias que están por detrás obtienen mejores contratos que ellas, mantienen.
Esta “nueva modalidad de contrato que se ha extendido” en la institución sanitaria genera, según el colectivo, “injusticias” ya que los profesionales que ocupan los primeros puestos en la bolsa de contratación de personal cuentan con “contratos precarios de días o están desempleados” mientras que algunos “privilegiados” que, presuntamente, tienen relación directa con la Dirección “poseen esas necesidades de servicio que se asemejan a una interinidad independientemente de si les corresponde el contrato interino”. Una nueva forma contractual que este grupo de enfermeras indignadas define como “interinos camuflados”.
Estas contrataciones siempre existieron, explican las sanitarias, pero rechazan que se conviertan en “vacantes que se alargan en el tiempo” ya que son “puestos que se requieren de forma excepcional y por periodos cortos”, mientras que “no sirve” para el uso que se les da en el Ingesa de Ceuta. En los casos que una vacante se alargue en el tiempo, señalaron las DUE –diplomado universitario en Enfemería–, “se debe hacer una modificación a otro tipo de contrato más adecuado pero, por desgracia, esto no ocurre y en el Área Sanitaria local sirve para, supuestamente, meter a los amigos haciendo trampas”.
El grupo señala que las “irregularidades” empiezan cuando salen contratos muy cortos, incluso algunos de un día, hasta llegar al número de una enfermera para que, en ese momento, salga la necesidad del servicio. “¡Qué suerte, qué casualidad!”, aseguran estas sanitarias, en la actualidad en paro.
Las DUE sostienen que mientras que las que están por delante de esta enfermera ocupan algunos días en distintos servicios, “esta afortunada dispone de una especie de interinidad ya que puede prolongarse hasta la jubilación”. Sin embargo, continúan las trabajadoras, el problema se presenta cuando los contratos por necesidades del servicio se prolongan durante más de un año ya que existe la posibilidad de que por continuidad del contrato en ese puesto, esta persona pueda solicitar una interinidad.
El artículo 9 del Estatuto Marco de Personal Estatutario, en su punto 3, establece que existe la posibilidad de expedir nombramientos de carácter eventual para la prestación de servicios de carácter temporal, coyuntural o extraordinario, es decir, los contratos por necesidades del servicio, informó CCOO. El mismo artículo especifica que si los nombramientos acumulan más de 12 meses en un periodo de dos años, procederá el estudio de las causas que los motivaron y si procede, la creación de una plaza estructural en el centro. Sin embargo, lamentan las enfermeras, esta normativa continúa sin aplicarse en la ciudad autónoma.
“Si a todo esto le añadimos la situación económica que atravesamos, donde la cantidad de empleo ofertado es prácticamente inexistente, estas acciones todavía son más indignantes”, sentencian desde este colectivo de Enfermería. Estas trabajadoras esperan y confían en recibir una solución a estos hechos “irregulares” ya que algunas de ellas, “aún mereciendo trabajar de acuerdo al baremo, nos encontramos en situación de desempleo”.
Necesidades del servicio en verano
El colectivo de sanitarias indignadas señaló que si el profesional afín al Ingesa está en puestos más atrasados en la bolsa de contratación, la situación se resuelve "sacando la necesidad de servicio en periodo vacacional". De este modo, indicaron las DUE, el Área Sanitaria logra dos objetivos: por una parte, tener cubriendo vacaciones a los que están por delante en la bolsa y, por otra, la posibilidad de poder llegar hasta el número del baremo deseado con los contratos de verano. "La consecuencia final es que estos puestos, que le vienen muy bien a algunos, no acaban de solucionar nada ya que no cubren la demanda del servicio, se convierte en auténticos parches cuando gran parte de la carga de trabajo tienen que asumirla otros, en cambio, existen áreas con verdadera necesidad de personal debido a la gran carga de trabajo y ahí, en cambio, casi no se cubren las incidencias", protestaron las personas que se declaran afectadas por esta situación.