El funcionario expedientado supuestamente por un abandono de servicio y dejación de funciones que podría haber provocado efectos colaterales tendrá la oportunidad de defenderse antes de recibir la sanción de Instituciones Penitenciarias, tal y como indicaron a este medio desde la penitenciaría ceutí. Hasta ahora, el funcionario sólo ha recibido el pliego de cargo, por lo que podrá recurrir a este expediente con todos los medios que tenga a su alcance. El proceso podría finalizar en un mes.
Compañeros del funcionario expedientado se concentraron ayer a las puertas del penal para pedir que no se le sancione. Al acto reivindicativo asistieron los representantes de los sindicatos Acaip, UGT y CCOO en la prisión.
En sus manos tenían las firmas del 80 por ciento de la plantilla, que serán puestas a disposición del trabajador para, a través de su defensa, presentarla ante la Dirección General de Instituciones Penitenciarias.
Guillermo Martínez, de ACAIP, aseguró que habían sido los compañeros los convocantes del paro de media hora, destacando que no se produjera una “utilización sindical” de la misma. Pidió que la calificación “se vea reducida y que no le suponga una sanción de tres a seis años de suspensión de funciones”. Mohamed Abdeselam, de UGT, aseguró que el compañero expedientado “siempre ha cumplido con sus obligaciones”, por lo que considera “desproporcionada la medida que se quiere tomar contra él”.
Por su parte, Manuel Domínguez, de CCOO, considera que una sanción de 3 a 6 años sería “desorbitada”. El sindicalista aseguró que existe una voluntad por parte de la Dirección General de rebajar la sanción “y hacer una petición de falta grave, que sería de 3 días a 3 años”. Además, dijo que la idea de la inspectora general de IIPP es “minimizar lo máximo posible esta sanción”. No obstante, para CCOO, lo justo sería “no sancionar al funcionario, porque equivocarnos nos podemos equivocar todos”. La Dirección de la prisión ceutí dice que respeta la decisión de los compañeros que se concentraron ayer.