Con el paso de los años y la situación que se ha vivido en las administraciones públicas españolas está muy claro que los técnicos tienen mucho que decir a las iniciativas políticas que tienen los gobernantes.
Resulta, desde luego, que un ejemplo lo encontramos en la licitación que tiene prevista Servicios Turísticos para traer turistas a nuestra ciudad por valor de un millón de euros. Un proyecto sobre el que se enmarcan parte de las medidas de activación al comercio que ha diseñado el Gobierno del presidente Vivas y que se había anunciado que estaba previsto poner en marcha a finales de marzo, coincidiendo con la Semana Santa.
Sin embargo, el departamento de Intervención ha puesto reparos que ahora deberán ser corregidos. Por supuesto, se va a atrasar, pero alguna fórmula debería buscarse para una mayor sincronización entre políticos y técnicos a la hora de que los proyectos no queden paralizados. Es verdad que han pagado justos por pecadores, pero, al final, los perjudicados son el conjunto de la sociedad de nuestra ciudad.