Esta tarde, en la plaza de Nelson Mandela y el Teatro del Revellín, se han celebrado dos de las actividades más esperadas del programa navideño de Ceuta: la Gran Chocolatada y la Zambomba de Jerez.
A las 18:30 horas daba comienzo la Gran Chocolatada. Bajo el porche de la plaza Nelson Mandela se instaló el puesto de churros que surtió a todos los asistentes de su deseado y esperado chocolate caliente, al que muchos acompañaban con este dulce.
El frío invitaba a unirse a esta Gran Chocolatada, que además de calentar la barriga mantenía las manos calentitas.
Este evento nos acerca un poquito más a la Navidad, significando un acercamiento a las fechas más esperadas del año.
La plaza de Nelson Mandela ha sido testigo de la diversión familiar y la ilusión de mayores y niños, que bajo el árbol de Navidad cargado de luces saboreaban ese chocolate calentito mientras congelaban ese momento para siempre con la cámara de su teléfono móvil.
Las colas para recibir este chocolatito llegaban hasta la puerta del Revellín, más los que esperaban fuera de ella hasta ver más despejada la misma.
Los niños se tomaron su chocolate y después aprovecharon el momento para jugar al fútbol o “pilla pilla” con amigos, mientras los padres tenían un ratito de desconexión sabiendo que sus niños estaban a buen recaudo.
Todos han asegurado que tanto el chocolate como los churros estaban deliciosos y que este evento era “lo que pegaba con este frío”.
También hay quienes se han animado a cantarnos un villancico, tan necesario para crear ambiente en la plaza, en la que se notaba la falta de música.
Para cubrir esta carencia tuvo lugar a las 19:30 horas la famosa ‘Zambomba’ con el grupo “La Zambombada de Jerez”.
Se desarrolló en el interior del Teatro Revellín. La aglomeración para la entrada fue tal que no cabía ni un alfiler bajo el porche de las inmediaciones del teatro.
Este colapso se vio reflejado en el interior, donde no quedó ni una butaca libre. La zona superior también fue ocupada, todo para disfrutar del ritmo traído de Jerez.
Zambomba de parrilla es como se denomina a estos llegados de Jerez para poner ritmo al Revellín.
El grupo estaba compuesto por nueve componentes. Las mujeres vestían unas prendas negras con brillantes que incitaban a esas quedadas de Navidad andaluzas alrededor de una candela mientras se intercambian canciones navideñas, flamencas y tradicionales españolas.
En la oscura sala se observaban unas pequeñas luces que procedían de los teléfonos móviles de los asistentes para rememorar el momento, dejando una imagen de cielo estrellado el lugar.
Desde el público también se acompañaba con palmas al grupo y los aplausos a la finalización de sus canciones se escuchaban retumbar en las paredes del Revellín.
Esta tarde ha sido un auténtico acercamiento a la Navidad, que cada vez está más cerca. Los ceutíes se han llenado las panzas con chocolate y tras terminar este delicioso manjar han disfrutado de la música con la ‘Zambomba de Jerez’.