La Ciudad ha puesto en marcha la maquinaria para que Ceuta cuente con un club de inversores. La iniciativa, aunque surge desde la administración, tiene la misión de constituir una sociedad limitada con un objetivo claro: captar empresas que quieran desarrollar su negocio y generar impacto económico.
Lo interesante de este tipo de iniciativas es que no se trata de asociaciones de emprendedores al uso, sino que se busca una participación económica directa en el proyecto. De hecho, se ha fijado una cifra de un millón de euros como listón mínimo para que este sistema tenga recorrido.
Al final, se trata de crear una cartera de ‘startups’ que deberá contar al menos con un 10% de entidades domiciliadas en Ceuta. Los miembros del club tendrán participaciones en la sociedad limitada que realiza las inversiones de forma mancomunada y participarán de forma voluntaria en los comités de inversión, en los procesos de apoyo y en los órganos de gobierno, ya sea el consejo de administración, la junta general o las comisiones de estrategia y riesgos.
Este tipo de entidades, relativamente nuevas, van surgiendo en todo el país en sectores muy ligados a las nuevas tecnologías y, por el momento, funcionan y generan empleo, algunas de ellas con ramificaciones en todo el mundo dependiendo de su actividad. Por ello, aunque el proyecto está aún en su fase inicial, que las instituciones se sumen a los nuevos modelos de colaboración entre empresas abre una vía más para situar a Ceuta como tierra en la que invertir.
Para proteger precisamente la apuesta del sector público en este club de emprendedores, se han marcado una serie de directrices claras, como que el Gobierno local, a través de Procesa, irá modulando su participación en la sociedad dependiendo de los resultados que se vayan obteniendo.
La ciudad tiene una serie de ventajas competitivas que no siempre son conocidas en el resto del país en materia fiscal y esta modalidad de relación empresarial, si se gestiona con rigor, puede ser un aliciente más para impulsar el desarrollo. Y además, se haría de la mano de quienes de verdad están dispuestos a arriesgar para instalarse en Ceuta con las mayores garantías y con la certeza de que serán escuchados en la toma de decisiones.
Es bochornoso lo palmeros que sois con el poder.
Algún día se estudiará todo y quedaréis en ridículo.