La titular del Juzgado de Menores de Ceuta ha dejado visto para sentencia el
juicio seguido contra los
dos acusados por el
crimen de Mohamed Alí que en el momento de suceder los hechos no habían cumplido los 18 años. Ambos han
prestado declaración enfrentándose a penas de hasta 8 años de internamiento para el varón y 7 y medio para la mujer, de acuerdo con la petición de la
Fiscalía. La Acusación Particular pide 8 para los 2. El varón ha negado su
participación como siempre ha hecho hasta ahora pero la fémina lo señala como partícipe en el crimen. El adulto, que acudía como testigo, no ha declarado y será sometido a juicio con Jurado, aún sin fecha.
Néstor García: “Un procedimiento justo para mi cliente”
El abogado Néstor García León, que ha acudido al juzgado junto al especialista en psiquiatría José Cabrera, ha manifestado al término de un juicio que ha durado unas diez horas, que ha estado “velando para que se cumplen las garantías procesales y toda la normativa relativa a ser un procedimiento justo para mi cliente y todas las partes”. “Ha sido un juicio largo, se ha practicado mucha prueba, mucha testifical, de Policía, informes forenses... Solo toca esperar el dictamen de su señoría, esperamos que tenga elementos de juicio suficientes para una sentencia acorde a derecho”, ha indicado en declaraciones a los periodistas. La abogada Concha Linares defiende a la única mujer acusada en este caso pero no ha hecho declaraciones.
García Montes: sin colaboración de los acusados para esclarecer el crimen
El abogado Marcos García Montes, letrado de la Acusación Particular, ha sido más explícito agradeciendo a la Policía “su magnífica labor” así como a los forenses para conseguir determinar que el varón acusado de asestar los golpes con un bate de béisbol estaba en perfectas condiciones. Montes ha resaltado la nula colaboración prestada por los acusados para esclarecer este crimen ya que no confesaron los hechos al momento. “Podía haber ido antes” a declarar, “fueron 8 meses ocultando” todo, ha indicado en relación a la mujer acusada quien se derrumbó narrando a un amigo común en una fiesta lo que había ocurrido. Según el letrado, “el juicio ha ido por carriles claros. Se ha querido echar porquería a la Policía… pero esta resuelto todo, la Policía ha estado clara”, ha indicado, en relación a las críticas y el debate abierto sobre si las entradas y registros o los primeros interrogatorios se habían hecho con autorización y en presencia de abogados. “Yo entiendo que hay 3 alevosías porque hay enseñamiento” ya que a la víctima le golpearon primero con un bate para, una vez perdida la conciencia, “en el suelo golpearle hasta la muerte”. “Está reconocido que compran lejía, spray, le roban el teléfono y lo tiran al agua, compran productos… intentaron hacer desaparecer todo”, ha insistido, considerando que además del intento de ocultación de pruebas ha existido un delito contra la integridad moral de Asma “porque se reían de la madre” mientras esta clamaba por la búsqueda de su hijo y además “participaban en las batidas”.
Una familia que quiere justicia y una indemnización no solicitada
García Montes considera que la acusada no colaboró sino que se derrumbó al confesar lo ocurrido y eso abrió de nuevo la investigación policial. “No llevaron a la Policía al sitio claro donde estaban los restos” porque aparecieron algo alejados del marcado. El abogado ha solicitado la reforma de “la ley penal juvenil” ante la proliferación de sucesos asociados a menores. Sobre la petición de indemnización que todavía no ha sido solicitada, García Montes ha hablado en futuro diciendo que la pedirá y en concreto serán 300.000 euros. No consta que se haya hecho en el momento procesal oportuno. Por su parte la
madre de Mohamed Alí ha vuelto a pedir justicia. “Quiero que no le condenen poco, quiero justicia, estos asesinos han mentido a todos, no es justo”, ha dicho.