Entre 300 y 400 personas han protagonizado esta tarde una avalancha en la
frontera del Tarajal en la que han logrado cruzar a Marruecos, aparte de las habituales mercancías, dos neveras y carretillas repletas de piezas de desguace. La multitud, en su mayoría mujeres, se ha acumulado delante de la Aduana española poco antes de las 6 de la tarde, y ha avanzado, sin incidentes, por los carriles de vehículos en dirección a
Marruecos. La
Guardia Civil, pese a su inferioridad numérica, ha facilitado su acceso ordenado con la seguridad de las personas como su máxima prioridad. Los
porteadores ha adoptado esta táctica coordinados por una o más personas que instigan estas avalanchas pacíficas. El tráfico se ha ralentizado por la frontera durante el tiempo que ha durado el alud humano. La muchedumbre ha quedado bloqueada momentáneamente en el puente internacional hasta que la Aduana marroquí la ha absorbido. Esto ocurría mientras que las colas de vehículos en la carretera de la frontera llegaban hasta la Almadraba, con menos coches-patera que de costumbre.