Un joven con una trayectoria impecable en deportes de contacto llegó a las filas del Cuartel del Grupo de Regulares de Ceuta nº 54 hace 5 meses, su nombre es Alfonso Gómez Díaz, tiene tan solo 24 años, pero un palmarés de escándalo.
Palmarés
La semana ha comenzado con el acuartelamiento de Regulares Teniente Coronel González-Tablas como espectador de la historia deportiva, compaginada con sus labores en lo militar de Alfonso Gómez Díaz, cuyo palmarés constata sus victorias como: campeón de Andalucía de kick-boxing; subcampeón de Andalucía de Muay Thai (etapa juvenil); campeón de Andalucía de Muay Thai (categoría adulta); 3º puesto en WKA Open Internacional de Muay Thai; y campeón en WKA K1 Open Internacional.
Recorrido
Comenzó con tan solo 8 años, siguiendo el ejemplo de su padre, y desde entonces no ha cesado en su empeño por acumular victorias; un hambre de crecimiento que lo llevan siempre a querer dar un paso más allá de lo ya alcanzado.
El joven soldado de Regulares acumula una intensa etapa de formación y competición en categorías inferiores y una trayectoria ya consolidad en su edad adulta, participando en campeonatos regionales, nacionales e internacionales.
En su etapa adulta refleja unos datos de 23 victorias, 3 derrotas y 1 empate, habiendo finalizado con éxito entre 20 y 25 combates siendo menor de edad y 26 tras cumplir los 18 años.
Entrevista en el salón Moro
Este lunes, Alfonso Gómez ha recibido a este medio para compartir lo que supone para él cada uno de los deportes de contacto que practica y cuál es su secreto para compaginar su pasión con su trabajo en el cuartel del Grupo de Regulares nº 54 de Ceuta. “Lo que me motivó es que mi padre era luchador y desde pequeño tuve su ejemplo. Un día, decidí ir al gimnasio a probar y ya desde ahí hasta el día de hoy”, ha comenzado relatando.

Desde los 8 años
Es cierto que los ocho años convierten este intento en un juego, pero esta diversión se fue profesionalizando con el tiempo hasta que empezó a entrenar de forma seria y con un propósito. “Con once años gané mi primer campeonato Andalucía de kick-boxing. Después, con trece, quedé subcampeón de Muay Thai de Andalucía”.
Y, así, una amplia trayectoria amateur siendo menor de edad. Su palmarés refleja un camino lleno de títulos y experiencias internacionales, pero siempre están aquellos que se recuerdan con especial cariño.
Logros que guarda con cariño
“Para mí son todos importantes porque depende del momento, pero si tuviera que quedarme con alguno, lo haría con el momento en que fui campeón de Andalucía de la FAKM de Muay Thai y, sobre todo, cuando gané el campeonato internacional de la WKA, que es la federación mundial que hay aquí vigente en España y es la federación más antigua del mundo”.
Gómez no solo se siente orgullo de lo conseguido, también del esfuerzo y constancia que requieren cada uno de sus logros. “Me siento orgulloso de mí mismo por el tema del entrenamiento que llevo detrás. Ya, cuando me subo a, disfruto”, dice relajado.
Su padre, su ejemplo
Su padre es una figura fundamental en su historia. Es su entrenador y el “que siempre viene a mi esquina”, dice refiriéndose al ring.
Puede parecer realmente complicado compaginar lo estricto de la vida militar con la disciplina y entrenamiento de alto rendimiento que requiere la preparación de un campeonato profesional, el próximo reto de Gómez, pero lo cierto es que, para él, no supone complicación alguna.
Cuando hablamos de pasiones, las complicaciones se convierten en retos. “La es que verdad que lo compagino bastante bien porque en la unidad, por la mañana, dependiendo de lo que mande el jefe, se suelen hacer circuitos de fuerza o resistencia y es algo que para mi deporte me viene muy bien. Después, ya por la tarde, pues le meto más enfoque lo que es a la técnica”, relata, dejando claro que se establece una simbiosis entre su trabajo y su pasión, todo un acierto para el desarrollo de las exigencias de ambas partes.

Apoyo del Grupo de Regulares
Gómez ha resaltado que el Grupo de Regulares nº 54, lejos de suponer una barrera en su carrera deportiva, se ha convertido en un apoyo imprescindible para seguir avanzando. “Aquí se ayuda a los deportistas”, asegura.
Lo cierto es que el mundo deportivo y la vida militar tienen una relación estrecha, compartiendo valores y trasladando lo aprendido de un lugar a otro. Gómez asegura que la vida militar aporta valores positivos a lo deportivo. “Sobre todo la disciplina, ya que los deportes de contacto son muy disciplinados. Y también la mentalidad. Un aspecto a valorar del ejército es la mentalidad de no rendirse nunca. Y eso lo llevo también a mi deporte”.
Próximo reto: 1 de noviembre
A sus 24 años ya tiene el próximo reto en mente y, en palabras del joven, “ya estamos en camino”. “Para un futuro próximo me gustaría optar a títulos profesionales, cinturones. Estamos en el camino. Tengo ahora un combate en Estepona el día 1 de noviembre y, si lo ganamos, me acercaría a títulos como los campeonatos profesionales de Andalucía, de España, etc”.
El Muay Thai, kick-boxking y K1 presentan unas características especiales: “el kick-boxing se golpea con las manos y las piernas; el K-1 con las manos, las piernas y las rodillas; y el Muay Thai se golpea con las manos, las piernas, las rodillas y los codos. Incluso vale lo que es el agarre de pie. Que por eso lo hace totalmente diferente”, resalta Gómez, añadiendo que todas ellas comparten la complicidad de “tener un buen físico”.

Bajada de peso: un reto
Dependiendo de la categoría se exige un peso corporal determinado, obligando al luchador a tomar medidas estrictas para llegar hasta él el día del combate. “Yo, por ejemplo, comienzo un mes antes con un nutricionista, ya que son bastantes kilos, y empiezo a bajar el peso. La última semana me sobre hidrato, es decir, bebo muchos litros de agua. Y, el último día, solo bebo medio litro o un litro de agua. Y ya doy el peso. Si no, me meto en la sauna o hago trabajo para sudar, sobre todo”, explica.
Este esfuerzo sí supone realmente una complicación a la hora de conciliar trabajo y pasión, pero como el mismo soldado de Regulares indica, “no todo va a ser bueno”.
Respeto y saber estar
Para Gómez, los deportes que practica “son muy importantes, ya que, como bien dice, es un deporte que otorga disciplina, respeto, educación y saber estar. Parece un deporte agresivo, pero no lo es”.
Para finalizar, este joven luchador y militar en las filas del Grupo de Regulares nº 54 de Ceuta no ha podido obviar los agradecimientos: “Quiero agradecer a mi unidad por dejarme entrenar aquí; a mi entrenador; y a mi familia por apoyarme siempre en todos los combates”.
Sin lugar a dudas, Ceuta gana con la presencia de Alfonso Gómez Díaz, una figura consolidad en el deporte y que recién empieza en las filas militares pero que ya conoce a la perfección los valores que comparten ambas y ha sabido compaginar sin excusas vagas su trabajo y su pasión.





