El pescador marroquí que fue detenido este jueves por la Guardia Civil, después de dejar en la piedra del Pineo, en Ceuta, a un inmigrante, ha sido condenado a una pena de 7 meses y 15 días de cárcel por incurrir en un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, tal y como han confirmado fuentes judiciales a preguntas de este periódico.
La Guardia Civil lo trasladó en calidad de detenido al juzgado en la mañana de ayer, dictándose sentencia de conformidad después de reconocer la comisión del delito. Aceptó por tanto la pena impuesta de 7 meses y 15 días de cárcel, periodo que queda suspendido durante tres años al carecer de antecedentes penales. Esta suspensión supone que en ese tiempo no puede volver a cometer delito alguno, ya que de hacerlo tendría que cumplirla.
El hombre fue sorprendido por la Guardia Civil a plena luz del día cuando estaba llevando a cabo el traslado de un magrebí en situación irregular a quien dejó en la roca ubicada frente a Juan XXIII. Después pretendía volver a Marruecos en su patera de pesca. Un agente de la Guardia Civil que estaba fuera de servicio vio la maniobra sospechosa, alertando a sus compañeros operativos. Ya se habían movilizado patrullas de Costas y el Servicio Marítimo, procediéndose así a la detención del pasador como de igual forma se pudo rescatar al inmigrante, avisando para ello a los GEAS. La patera quedó intervenida.
En este caso en concreto se detuvo a quien había incurrido en un delito de tráfico de personas, usando para ello su patera de pesca al objeto de pasar desapercibido ante los controles y las vigilancias efectuadas por las fuerzas de seguridad.
En otros, se están usando motos de agua para introducir de manera irregular a inmigrantes a través de los espigones, en una maniobra que dura minutos y que se está convirtiendo en todo un negocio para las pequeñas redes que lo controlan.
Manejan la explotación de la inmigración e incluso captan a jóvenes y menores de edad para utilizarlos como pilotos en estos traslados. La Guardia Civil ha detenido ya a varios de estos pasadores y ha intervenido embarcaciones por ser sospechosas de estar relacionadas con los delitos de tráfico de personas o de drogas.
En las últimas semanas, tal y como adelantó este periódico, se ha procedido al traslado a la lonja de pescadores -en donde tiene su base el Servicio Marítimo-de varias motos de agua y phantom que estaban en el puerto deportivo y que han sido marcadas por el helicóptero del Instituto Armado y el SIVE tras seguimientos diarios efectuados en las distintas bahías.