La magistrada del juzgado de lo Penal número uno condenó ayer a un hombre a seis meses de prisión como autor criminalmente responsable de un delito de estafa continuado, recogido en los artículos 248 y 249 del Código Penal. Además, el hombre deberá abonar una indemnización de 1.800 euros para la víctima para compensar el dinero que le sustrajo. A pesar de ello, el acusado se declaró insolvente.
Los hechos por los que el hombre se sentó en el banquillo de los acusados tuvieron lugar en los primeros días del mes de enero del año 2009. Según el escrito de acusación, el hombre sustrajo la tarjeta de crédito a un tercero y posteriormente realizó diez operaciones económicas de 200 euros cada una. La entidad bancaria BBVA devolvió a la víctima el dinero de la última de ellas, pero el resto quedaron pendientes de que se solucionara la cuestión judicial. Ahora, se supone que el acusado debería abonar la cantidad de la indemnización, aunque manifestó no tener dinero, ni bienes, ni ingresos para hacer frente a la responsabilidad civil. Este hecho podría influir en la concesión o no de la suspensión condicional de la pena.