Los vecinos de la barriada de Hadú se quejan de la suciedad, falta de contenedores y del abandono que sufre esta barriada. Llevan razón, pero llevar razón no es suficiente, sobre todo cuando llevar razón no soluciona ni lo más elemental: poner contenedores.
También llevan razón -se verá con el tiempo- que derribar la actual Comandancia de la Guardia Civil creará más inseguridad en la barriada. Puede que se quiera rebatir que lo que decimos no se sustenta, porque la Guardia Civil no lleva la seguridad ciudadana en el barrio, pero ese argumento no se mantiene si analizamos el efecto negativo de quitar el Puesto de la Guardia Civil de Príncipe Alfonso, sito en la calle Fuerte de la citada barriada.
Un Puesto de la Guardia Civil donde diariamente subían más de 90 guardias civiles repartidos en tres turnos diarios, más los muchos que iban a realizar trámites profesionales. Era un subir y bajar constante de guardias civiles que nos facilitaba tener un contacto diario con los vecinos de la barriada a los que conocíamos por su nombre. Ese trasiego le daba seguridad y normalidad a la barriada, porque era normal ver a un guardia civil de uniforme o paisano coger el autobús, subir caminando, con su propio vehículo y, por supuesto, con los vehículos oficiales.
Han pasado algunos años desde que se cerró el Puesto de Príncipe Alfonso y muchos de los antiguos vecinos y de los viejos guardias civiles coincidimos en que el barrio perdió mucho cuando cerró, pero sobre todo, Ceuta en su conjunto perdió en seguridad ciudadana. Esto es incuestionable, porque la seguridad ciudadana tiene mucho que ver con el contacto de los ciudadanos con los policías o guardias civiles para saber del día a día del barrio.
Ceuta es una ciudad con singularidad y eso nos debe hacer reflexionar en las inversiones
Un error más fue instalar el polígono industrial en plena frontera sin respetar el mínimo espacio de seguridad entre el polígono y la zona fronteriza. Una valla y después de ella, un polígono industrial, que ha generado poca riqueza para Ceuta y los ceutíes y un montón de problemas de seguridad ciudadana para los guardias civiles y ciudadanos. Nada de lo que decimos es pura demagogia, porque en ese polígono se ha hecho contrabando lanzando los bultos con la técnica del voleibol, se han apedreado a guardias civiles para provocar el desconcierto y lanzar los bultos; en definitiva, se han generado muchos problemas de seguridad ciudadana.
Son errores que, como decíamos, se podrían haber evitado si los que no tienen ni idea en seguridad ciudadana hubieran tenido la humildad de escuchar a los que son expertos en esta materia, porque los jefes de aquella etapa advirtieron que era un error colocar un polígono, que se esperaba muy transitado, en un lugar donde los guardias civiles deben trabajar con seguridad, tranquilidad y con espacio para poder reaccionar a posibles vulneraciones del territorio y otros problemas de seguridad ciudadana.
Ahora anuncian otra vez “que viene la nueva Comandancia”, aunque no nos hacemos la ilusión por aquello del cuento ¡Que viene el lobo!, pero el lobo no venía. Un anuncio más que ha provocado una reacción del presidente y vecinos de la barriada, no contra la construcción de una nueva Comandancia, todo lo contrario, con quitar el uso que se le está dando a la actual, porque ambas cosas son posibles e incluso deseables para los vecinos de Hadú.
Por hacer un repaso de dónde venimos -en esto de construir una nueva Comandancia- es de sobra conocido que antes se pensó instalar justo frente a la actual, pero conservando el viejo edificio. Se especuló y hubo hasta una especie de proyecto en el que se pretendía hacer un pasillo subterráneo que comunicara las dos. Esta idea se mantuvo durante un tiempo y, de alguna manera, se intentó impulsar, pero al final se ha desechado. Una historia de nunca acabar.
Ceuta es una ciudad con una singularidad especial en todos los sentidos y esta circunstancia nos debe hacer reflexionar en la necesidad de acertar plenamente en las inversiones e infraestructuras que se quieran realizar, pero sin olvidar, que todo el mundo no reside en el centro de la ciudad.