Agentes de la UDYCO adscritos al grupo de Estupefacientes han desarticulado una organización dedicada al tráfico de hachís que se dedicaba al pase de droga en dobles fondos practicados en vehículos. En la operación, que ahora se publicita porque es ahora cuando ha terminado, se ha dado a conocer el saldo final de detenidos.
Un total de 10, entre los que se encuentran tres ceutíes, cinco vecinos de Barcelona y dos de Sevilla. La operación se inició hace unos meses cuando la UDYCO tuvo conocimiento de que había un grupo de personas que mantenían relaciones con otras radicadas en Sevilla, las cuales se encontraban perfectamente organizadas y se dedicaban al pase de hachís, haciendo uso de vehículos con dobles fondos.
Supuestamente los implicados en Ceuta coordinaban los traslados con los enlaces en Sevilla para su introducción en la península.
Las investigaciones, tal y como informa la Policía Nacional, culminaron con la intervención de dos vehículos que portaban un total de 340 kilogramos de hachís y la detención, de manera gradual, de estas diez personas.
Además se procedió a la incautación de seis vehículos, de los que tres son considerados de alta gama, y la aprehensión de 22.000 euros en metálico, hallados en el registro de una de las viviendas practicado en la ciudad autónoma.
Todos los detenidos fueron puestos a disposición judicial conforme se produjo su arresto, permaneciendo hoy en prisión preventiva por su presunta relación con un delito contra la salud pública. Tal y como han informado fuentes policiales, las sospechas de las intervenciones de esta organización comenzaron con el hallazgo de la droga en el doble fondo llevado a cabo en un vehículo. En esa intervención la Policía ya detuvo a varios de los implicados, pero no se comunicaron los hechos para seguir hilando cabos hasta llegar a nuevos integrantes de la red.
Así, hace escasamente un mes se procedería a la detención de uno de los presuntos cabecillas de la organización, procediendo al registro en su casa hallando el dinero e inmovilizando varios coches. Se presume que tendría relación con el movimiento de la droga que otras personas llevaban a cabo a través de una flota de coches y en concreto con el vehículo que fue intervenido con los más de 300 kilos de hachís.
Los dobles fondos para traslados continuados
Lo que subyace detrás de la intervención llevada a cabo por el grupo de Estupefacientes no es más que la acción sobre lo que la Policía entiende como una organización que hacía uso de vehículos con dobles fondos para pasar grandes cantidades de droga. El control sobre la mercancía se la atribuye a uno de los detenidos, conocido por sus negocios en la ciudad, mientras que al resto se le vincula con el traslado de la droga y su introducción en la península. Las distintas detenciones se han llevado a cabo tras la obtención de distintos datos.